En su día más triste como entrenador del Leganés, Borja Jiménez quiso salir al frente del equipo y de sus jugadores. Los pepineros pusieron compromiso y alma hasta el final, pero no dio para seguir en Primera.
Orgulloso de todos: “Nuestras últimas palabras solo pueden ser de agradecimiento para la gente y nosotros. No voy a buscar otros culpables, no es el día, y solo puedo pedir perdón a nuestra gente. Llegamos a los 40, pero no nos dio”
El gol del Espanyol, el peor momento: “El primer gol del Espanyol fue una sensación muy desagradable, como que algo se estaba muriendo y fue muy triste”.
Un descenso es un descenso: “No hay consuelo ahora mismo. La afición ha demostrado que es especial y si hay una manera de perder la categoría que sea así y con el cariño de la afición. Han sido ejemplares”.
No depender de sí mismos: “No ha sido la forma que queríamos terminar. A los jugadores no les podía transmitir el vacío de no depender de nosotros mismos. Hay que hacer autocrítica”.
Lágrimas al final: “No sé si es mi despedida. Gracias a la afición solo le puedo decir eso. Que pierdas la categoría y que canten tu nombre y te digan que te quedes nunca lo he visto. Solo puedo dar las gracias”, concluyó Borja entre lágrimas.
Comentarios