Richard Hammond ha vuelto a sufrir un accidente en un rodaje de The Grand Tour. Por suerte, esta vez no ha tenido consecuencias físicas para el británico y sus propios compañeros han podido tomarse el asunto más en broma respecto al anterior, en el que la vida del presentador corrió serio peligro.
Esta vez ha sido en los highlands escoceses y pilotando muscle cars clásicos americanos y, al parecer, ha podido ser recogido con todo lujo de detalles por las cámaras instaladas en los vehículos, de modo que podremos ver la historia con pelos y señales en próximos episodios de The Grand Tour, el show de coches de Amazon Prime Video.
Hammond ha tenido su habitual accidente, uno de los buenos. El mejor de los suyos, diría yo"
El trío de presentadores estaban grabando una pieza con un Cadillac, un Llincoln y un Buick modificados al parecer para disputar una drag race, un duelo de aceleración al más puro estilo americano. No han trascendido muchos detalles... salvo las palabras de su compañero Jeremy Clarkson, que no ha tardado en sacarle punta al asunto.
"Richard ha sufrido su accidente habitual. Este ha sido de los buenos, seguramente el mejor de su carrera" ironizaba Clarkson con su habitual sorna. "Digo esto porque no ha sufrido heridas, y ha tenido suerte porque no creo que con las restricciones por el Covid hubiese podido ir en la ambulancia con un extraño".
Es el tercer incidente importante de Hammond en su trayectoria como presentador, primero de Top Gear en la BBC y después en The Grand Tour. Además del tremendo susto que sufrió hace tres años cuando se salió de la carretera con un Rimac eléctrico de más de 1.000 CV que acabó pasto de las llamas, en 2006 se salió de la pista con un dragster cuando rodaba a más de 450 km/h.
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