martes, 12 abril 2011, 12:56 383u2s
Ante el reloj de Fergie, un recuerdo y quiz Benayoun 6g38
Viaja el Barcelona a Donetsk con la precaucin lgica del que no quiere conceder ninguna posibilidad al rival de reengancharse a una eliminatoria prcticamente decidida. As que el foco meditico mundial estar esta noche en Manchester, donde el United quiere seguir soando con un triplete que se presuma imposible en la temporada presente pero que sigue apareciendo como una posibilidad real a mediados de abril. Su rival vive entre el drama y la obsesin: su tan deseada Champions puede evaporarse una vez ms, y esta vez lo hara casi cerrando un ciclo. O dos: el de sus jugadores ms emblemticos y el de su entrenador Ancelotti, el que logr el doblete en su primera temporada en Inglaterra -hito histrico-, pero tambin el que ahora parece desorientado e incapaz de hacer fabricar ftbol a un conjunto plano y previsible. Pero es el Chelsea; tiene, a priori, mucho gol, y ya el ao pasado gan 1-2 en Old Trafford. Hay eliminatoria. Al menos, es la ms abierta de las cuatro.
Sir Alex Ferguson, el maestro de la sorpresa
Es el entrenador que ms tiempo lleva en la elite, pero sigue siendo casi imposible adivinar qu alineacin sacar en los partidos importantes. Sus decisiones no siguen una lnea argumental que se repita en el tiempo: tienen que ver slo con el momento concreto y puntual. En la ida del Bridge, el tcnico escocs nos asombr planteando un 4-4-2 con Rooney y Chicharito arriba -normalmente en Europa juega 4-5-1-, pero sobre todo llam la atencin la ubicacin de Ryan Giggs al lado de Carrick en el centro. Su equipo no domin, pero control el partido con relativa comodidad, se adelant con una accin ejecutada con precisin mecnica y se encomend al gran trabajo defensivo de un bloque quese contagiade la solidez de su tringulo base (Van der Sar-Vidic-Ferdinand). Cuando Ancelotti quiso atacarlo por el lado de Park resituando a Essien como lateral derecho en los ltimos minutos, Sir Alex movi las piezas reaccionando de inmediato: el coreano se fue al centro y Rooney cerr en la izquierda.Es una constante elogiable en este United versin 2011: los jugadores de etiqueta trabajan igual que los dems.El mensaje del entrenador se asume yse ejecuta, sin importar que a ojos de los observadores pueda resultar discutible.Nadie se avergonz por salir en casacon siete tericos defensores ante el Arsenal en los cuartos de final de la presente FA Cup y plantear el encuentro descaradamente a la contra. Era la estrategia diseada para ganar y sali bien. As que hoy tampoco debera sonar nada extrao que el veterano entrenador escocs aceptara que el Chelseatuviera ms posesin de baln. Ya la tuvo en la ida y slo cre peligro a base de empuje, algo queresulta casi inevitable.
El ejemplo del ao pasado y Benayoun como alternativa
El precedente est ah y es casi exacto. Hace un ao (3 de abril de 2010), el Chelsea viajaba a Old Trafford con la necesidad de ganarle al Manchester United. No era una eliminatoria a doble partido, pero la trascendencia era prcticamente idntica. Jornada 33 de la Premier League, el equipo de Sir Alex llegaba al partido con un punto de ventaja y la oportunidad de sentenciar el campeonato. El Chelsea saba que slo dependera de s mismo si sacaba los tres puntos del Teatro de los Sueos y sali con esa actitud. Con el que quiz sea el equipo ms asociativo de toda la era Abramovich. Aline de inicio juntos a Joe Cole, Zhirkov, Deco, Malouda y Lampard. Y gan 1-2, un resultado queesta noche le valdra. Claro, dos de esos cinco jugadores, los de mayor improvisacin, ya no estn en la plantilla. Otros dos, Lampard y Malouda, han bajado mucho su rendimiento. As que repetirlo parece complicado. Es por ello queentra en escenael nombre de Yossi Benayoun, que reapareci el sbado tras seis meses lesionado ante el Wigan y en los 45 minutos que tuvo mostr que le da al equipo un aire distinto, una imprevisibilidad preciosa. El israel quiz no est an para salir de inicio, pero es exactamente el tipo de jugador que puede hacerle dao a un reloj como el United. De hecho, ya fue la estrella de un partido que el Liverpool le gan a su eterno rival en octubre de 2009. Ese da le dio un pase genial a Torres, que se desmarc al espacio y volvi a ganarle la partida a una defensa que se le suele dar bien -por eso Ferguson no querr hoy conceder metros a la espalda de sus centrales-. La gran esperanza del Chelsea es que el punta madrileo despierte ahora que ha vuelto el que fuera su mejor socio en el tramo final de su periplo en Anfield.