El inesperado 'crossover' entre 'La Revuelta' y 'La isla de las tentaciones': "Con permiso de Broncano"

A pesar de pertenecer a diferentes medios de comunicación, 'La Revuelta' y 'La isla de las tentaciones' se unieron durante la última emisión del programa de Telecinco. La historia comenzó el pasado 29 de enero, cuando una persona del público acaparó todos los focos de la noche en el espacio televisivo presentado por David Broncano.

María, una señora que se ubicó en la bañera del programa, habló con el jienense sobre una de sus grandes pasiones: seguir el día a día de 'La isla de las tentaciones'. El presentador aseguró que lo ves un rato y “no puedes parar”. “Uy, no. Ahí hay un montón de putiferio”, comentó la mujer, que provocó la risa de todos los presentes en el Teatro Príncipe Gran Vía de la capital madrileña.

“Yo no sería capaz de ir. No iría porque caigo en la tentación. Es que hay muchos tíos muy buenos”, comentó la señora, que también le dedicó unas palabras a Montoya, el gran protagonista de esta edición de 'LIDLT'. María señaló que el concursante “se ha roto la camisa, pero ahora cuando vea... se va a romper hasta la cabeza contra la palmera”.

Este jueves, 6 de febrero, Sandra Barneda le dio la bienvenida a María en el plató de Telecinco: “Por su gran conocimiento de 'La isla de las tentaciones'... Esta noche, con permiso de Broncano, desde 'La Revuelta, en Mitele Plus… ¡Adelante, María!”. La invitada recibió una grandísima ovación por parte de todos los asistentes al programa, que incluso la ovacionaron al grito de 'María, María, María'. De fondo, Suso se vino arriba y tocó el bombo para júbilo de todos.

María, a Montoya: “Me encantaría comerme un poquito de salchichón de Marmolejo, que la primera rodaja no tiene pellejo”

“María, bienvenida al debate de 'La isla de las tentaciones'. Hoy vas a conocer a Montoya”, le comentó Barneda a la señora. “Uh, lo voy a poner fino”, respondió la invitada. Sin embargo, cuando entró el participante de esta edición del espacio televisivo de Mediaset, ambos se fundieron en un entrañable abrazo. Además, el mejor momento fue cuando María le dijo lo siguiente a Montoya: “Me encantaría comerme un poquito de salchichón de Marmolejo, que la primera rodaja no tiene pellejo”.