El Elche visita este sábado al Huesca con el objetivo de mantenerse en lo más alto de la clasificación y continuar alimentando el sueño del regreso a Primera dos años después. En la previa del encuentro, su entrenador, Eder Sarabia, transmitió un mensaje claro: ambición, confianza en el grupo y orgullo por la conexión que se ha generado con la afición.
"El equipo transmite convicción. En este tramo final ha demostrado saber sobreponerse a las derrotas. Pese a los errores que cometimos ante el Levante, hicimos el 95% de las cosas bien", explicó Sarabia, reforzando el mensaje de confianza y aprendizaje tras el último tropiezo.
La presencia de 500 aficionados franjiverdes en El Alcoraz será un nuevo respaldo para un equipo que siente el aliento de su gente como un impulso extra. "No les podemos pedir nada más. Esta semana, incluso tras una derrota, he notado más orgullo, más ganas de disfrutar el camino. Queremos hacer otro gran partido para compartirlo con ellos".
Es una maravilla ser líderes. Esta posición es fruto de la autoexigencia y del trabajo bien hecho
El técnico celebró que su equipo dependa de sí mismo en la recta final del campeonato. "Es una maravilla ser líderes. Lo hemos celebrado cada semana. Esta posición es fruto de la autoexigencia y del trabajo bien hecho. Estamos preparados para estar a la altura".
Respecto al planteamiento ante el Huesca, Sarabia fue tajante: "Nuestra obligación es pensar en ganar desde el principio. Si al final el empate es bueno, sabremos gestionarlo. Pero salimos con mentalidad ganadora".
También subrayó el ambiente que se vive en Elche como una de las grandes claves del momento que atraviesa el club. "Se ha generado una unión muy especial. Es algo de todos, de la ciudad y del equipo. Disfrutamos del camino con respeto, sabiendo la dificultad de cada partido. Queremos seguir generando esa ilusión. Eso es algo que nos llevaremos para siempre". El Elche, líder sólido y con el ánimo intacto, se enfrenta a un nuevo reto con la convicción de quien sabe que el objetivo está cerca, pero aún queda camino por recorrer.
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