La carrera de Nico Williams (22 años) es tan vertiginosa como su juego. El extremo del Athletic se adentró con sigilo en el radar de todos los grandes de Europa gracias a un desborde que le permitió entrar en la lista de Luis Enrique para el Mundial 2022. Y es que aunque se trata de un futbolista en constante crecimiento, la explosión definitiva en su fútbol llegaría tras una llamada que le cambió su vida por completo.
"Nico es un jugador de banda muy interesante con una velocidad maravillosa para poder desbordar", confesó el exseleccionador español, que vio antes que nadie que un cambio de banda podría marcar por completo la carrera del joven talento español. Sin embargo, no sería hasta la última Eurocopa donde su impacto ya no habría manera de controlarlo de cara al mundo. Su dupla con Lamine fue el mejor anuncio posible para España, la selección más atractiva de todas gracias a su fútbol ofensivo y alegre de sus dos extremos.
Un cambio clave... gracias a Luis Enrique
Así las cosas, sus brillantes (y constantes) actuaciones y su gran amistad con el azulgrana, tanto dentro como fuera del terreno de juego, ayudaron a situar rápidamente al joven talento en la órbita culé, que en ese momento dudaba en si desprenderse de Raphinha. Todo cambió con Flick, que consiguió sacar su mejor versión, y los problemas económicos de un Laporta que trataba de hacer números en la nada hicieron el resto. "En cuanto a Nico, es cierto que era uno de los candidatos el pasado verano. Nos decidimos por Olmo. Creo que en estos momentos se contemplan otras opciones", confesó el presidente catalán.
La primera vez se me hizo bastante raro. No estaba acostumbrado. Pero creo que el cambio me ha favorecido
Con contrato hasta 2027 y una cláusula de rescisión de 58 millones, MARCA adelantó que en Valdebebas valoran seriamente el fichaje de Nico Williams. Un golpe anímico para el eterno rival y la llegada de un futbolista diferencial: joven, explosivo, con gran impacto mediático y proyección tanto deportiva como comercial. Su condición de internacional español también suma puntos en un equipo que busca mantener una base nacional sólida. Un fichaje que gusta al madridismo, pero que le genera dudas por su posición en el campo... y por la necesidad de cubrir primero otras posiciones que esta temporada han sufrido en exceso (director de juego, lateral izquierdo y derecho, un 9 puro...).
Sin embargo, aunque Nico ha explotado desde la banda izquierda, no siempre fue así. "La primera vez se me hizo bastante raro. No estaba acostumbrado. Pero creo que el cambio me ha favorecido. Toda la vida he jugado en la banda derecha, y era un cambio que creo que necesitaba. En banda derecha, tengo más posiciones para centrar", explicó el 10 del Athletic. Dicha versatilidad es uno de sus puntos fuertes y la gran ventaja para el esquema de Xabi Alonso.
Huecos 'fantasma'
"Siempre nos dice que las posiciones tienen que estar siempre ocupadas, pero no siempre por el mismo jugador", explicó Grimaldo sobre el estilo del entrenador español. Y es que en situaciones de ataque, Nico entiende bien cuándo debe dar amplitud, tanto para habilitarse en ventaja posicional sobre el defensor, como para ampliar los espacios de la línea defensiva rival. Una inteligencia táctica que le permite brillar y hacer brillar al resto con suma facilidad. "Uso bien la pierna izquierda, pero para mí es mejor jugar a banda cambiada. Me puedo meter para adentro y chutar. Me siento más cómodo en la banda izquierda. Me giro mejor y manejo mejor los espacios", explica Nico.
La lectura de movimientos; sumado a su velocidad, potencia y explosividad; le permite acertar a la hora de decidir si ser incisivo desde el pasillo interior o exterior. De fichar por el Madrid, al extremo le tocará elevar sus números. Los atacantes viven de lo que producen y por ahí veía un margen de crecimiento en su fútbol. Nico ha firmado 11 goles (tres más que la temporada pasada) y 7 asistencias en los 3.050 minutos que ha disputado en un total de 43 encuentros. Es decir, un tanto cada 277 minutos. Cinco ha firmado en Liga, cinco en Europa League y uno en Copa.
Su sueño es jugar con Mbappé
Así las cosas, el extremo no duda en reconocer que la libertad que le ha entregado Luis de la Fuente le ha permitido brillar con más comodidad porque ahí es donde vuelve a reencontrase con su esencia: "Con Luis Enrique se trataba más de combinaciones y un regate es como jugar en el parque cuando eres un niño", aseguró poco después de levantar la Eurocopa con España, donde llegó a confesar que su sueño era jugar con Mbappé.
"Al final Mbappé es un gran jugador. Desde que era pequeño me he fichado mucho en él. Desde que estaba en el Mónaco me gustó mucho su estilo de juego", explicó sobre un futbolista con el que considera tener un cierto parecido en su fútbol. "Los regates de Mbappé tiene similitud a mí, salvando las distancias. Es un gran jugador. Me gustaba fijarme en él para llevarlo al terreno de juego".
Antes, con 10 años, Nico empezó a poner la primera piedra de un fútbol que ahora le ha llevado a ser una prioridad del Real Madrid. "Yo era muy pequeño, tendría 10 años, y fuimos a jugar al parque con sus amigos. Hicimos equipos y quedamos mi hermano en un lado y yo, en el otro. Iñaki me picaba: 'No vas a hacer nada, ya verás con los mayores… No tienes que jugar porque te van a dar palos'. Y al final acabamos ganando. Sus colegas venían a jugar conmigo. No querían jugar más con él", contó en una entrevista en El País sobre una explosión incontrolable que a día nadie pone en duda.
Comentarios