Asencio y la táctica del Real Madrid para asegurar el futuro de Valdebebas

Calma y tranquilidad del Real Madrid con Raúl Asencio. El momento de la renovación y adecuación de su contrato a su rendimiento llegará con la temporada acabada. No hay problema alguno por dos motivos. El primero hace referencia al compromiso del futbolista y el segundo a la manera que tienen en Valdebebas de asegurar la continuidad de los futbolistas a los que se ve con capacidad de en algún día de ser jugadores del primer equipo y que no todos tienen la oportunidad de  firmar.  Se sentarán, hablarán y con todo muy claro y con el juego del canterano como argumento, el acuerdo se cerrará sin problema, tal y como aseguran desde Valdebebas.

Es una selección, con aciertos y errores, pero que se aplica a los que tienen ese sello de jugador importante y que hace referencia a que en el momento en el que llegan a tener sitio en el primer equipo blanco, su contrato se extiende durante cinco temporadas más, en otras condiciones, pero asegurado su concurso y con una cláusula disuasoria, en este caso de 50 millones de euros. No valen apariciones esporádicas y sí el tener un sitio asegurado en la plantilla, es decir, ser uno más.

Raúl Asencio firmó esa fórmula cuando ya con la mayoría de edad firmó el contrato que le une con el Real Madrid hasta el 30 de junio de 2026. En cualquier caso, el defensa ya sabe que la intención de la entidad que preside Florentino Pérez es sellar un nuevo contrato con independencia de la existencia del ya firmado

Explosión 

Lo mostrado por Asencio no ha pillado por sorpresa en los que mandan en la cantera, que tenían claro hasta donde podía llegar el canario, como tampoco la han tenido con Joan Martínez o Jacobo Ramón, algunos otros de los señalados como futuribles. Lo cierto es que la remesas de centrales que asoman ilusionan como por ejemplo los juveniles Mario Rivas, Aguado o el 'veterano' Ribes, más los que vienen más abajo todavía.

El proceder del Real Madrid con los canteranos es sencillo y siempre sin salirse de la legalidad y protección que tienen los menores. Contratos de tres años a los 16 años y ya con la mayoría de edad asomando, otro vínculo más profesional adaptado a cada uno, pero raro es aquel que se asoma al Castilla y no está 'asegurado', como es el caso de Asencio.

El central es una excepción en el sentido en que la llegada y asentamiento en el primer equipo no es habitual, pero las necesidades han obligado y el central las ha sabido aprovechar. En Valdebebas se miden los pasos con los más jóvenes, pero es muy complicado que alguno que apunte y que así lo desee, tenga la puerta abierta de salida. Con Asencio no hay duda alguna, pero todo está pendiente de una reunión en unos meses. 

Están los que quieren, como en el primer equipo

En el Real Madrid tienen claro el proceder con los futbolistas, con independencia de la edad. El que no quiera seguir, se habla y se encuentra un punto de acuerdo, como sucedió el pasado verano con Paulo Iago, que pese a ser de los elegidos, no estaba de acuerdo con la presión y se terminó marchando. Días atrás se habló de Jesús Fortea y su futuro, respecto a lo de renovar o no el contrato que termina el 30 de junio de 2026. El lateral ya sabe que no valen pulsos con el club en ese sentido.