Éric Roy: "Quizá Ancelotti no tiene ahora una idea de juego muy clara, pero ha ganado cinco Champions"

Eric Roy (Niza, 1967) es un héroe en la bretaña sa, especialmente en Brest. El club galo le rescató del abismo en enero de 2023, tras más de diez años sin entrenar, y de una carrera casi acabada ha pasado a ser uno de los entrenadores de moda en Francia. Nombrado mejor entrenador de la Ligue 1 la campaña pasada tras quedar tercero y meter al equipo en Champions, esta temporada ya ha hecho historia en el primer año de los piratas en Europa, puesto que, aunque hay pocas opciones, juegan incluso para meterse entre los ocho primeros. Éric echa la vista atrás con MARCA. Ha sido comentaristas, responsable de marketing, director deportivo pero ya no va a dejar los banquillos. "La verdad es que mi historia es un poco increíble".

Pregunta: ¿Cómo está el ánimo del equipo para recibir al Madrid?

Respuesta: Muy bueno, siempre lo ha sido y siempre ha sido nuestra fuerza. Somos un equipo con menos medios también en la Ligue 1 y nuestra fuerza es el colectivo. Si perdemos eso, malo, así que estamos bien. Ante el Shakhtar no hicimos un buen partido pero los jugadores están muy enchufados, seguro, felices, porque todo esto es increíble.

Mi historia es un poco increíble, llegué a pensar que todo se había acabado, pero llamó el Brest

Eric Roy

P. ¿Y cuál es el plan para ganar al Madrid?

R: No hay nada que esconder, proponer cosas cuando tengamos el balón, no quedarnos mirando al Madrid jugar. Sabemos que el Madrid marca goles, que es increíble, y tendremos que hacerlo nosotros si queremos competir.

P. ¿Cómo acabó en el Brest tras estar en el olvido más de diez años sin entrenar?

R. Mi historia es un poco increíble. Vine al Rayo en el final de mi carrera, con 33 años, volví a Niza para acabar en mi club. Volví para ayudar, hice dos años increíbles antes de retirarme y después el club me propuso seguir, pero lejos del campo. Hice un montón de cosas, temas de marketing, ideas sobre el nuevo estadio. Un poco de todo. Después de varios años el entrenador y el director deportivo se marcharon y el club me propuso el cargo de director deportivo y así volví. Pero desde el principio el entrenador no funcionó y me propusieron el banquillo. No tenía el diploma ni había entrenado nunca y me vi en el banquillo porque en el club no había medios. Me dijeron que me apañara y me reuní de gente del club e hicimos un plan de salvación y lo logramos.

Hace dos años nadie se imaginaba por aquí que íbamos a estar jugando la Champions contra el Madrid

P. ¿Ese fue el momento en que entonces lo vio claro?

R. Desde que me senté en el banquillo sentí que estaba hecho para mí entrenar, pero el problema es que no tenía el carnet. Y si no lo tienes no puedes entrenar y, tras un par de años, me fui para pasar el curso. Y en Francia es bueno pero largo, estaba en la promoción de Zidane, de Makelele, Saignol… Nos llamaban la promoción de los campeones del mundo, lo eran todos menos yo. Ha durado tres o cuatro años y en esa fase de tiempo te van olvidando y cuando estás listo, pues no hay clubes. Así que trabajé en la tele con algunos medios que me permitían estar ahí conectado. El Lens vino y me propuso el cargo de director deportivo. Tenía ganas de entrenar y partí a Inglaterra, al Watford, hasta el covid. Tenía esas ganas, pero en esos diez años nunca me elegían, me quedaba a punto, y llegue a pensar que se acabó todo. Me llamó entonces Lorenzi (actual director deportivo del Brest) que era un amigo, y una de esas veces charlando le comenté que si necesitaba un entrenador que me llamara. Me llamó una primera vez hace cinco o seis años, pero al final eligió a otro; una segunda vez y lo mismo, fue otro, y a la tercera, en 2023, en diciembre, me llamó para decirme que fuera. Me dijo, hablamos y vemos, y tras charlar me dijo que el cargo era para mí. Y en enero estaba aquí en el plan de salvación, porque el equipo estaba en puestos de descenso. Hicimos 31 puntos y nos salvamos con holgura. Y luego pasó lo que pasó.

P. ¿Era muy 'cañero' en la televisión?

R. Bueno, yo era el comentarista, no el narrador. Intento siempre ser protector porque he sido jugador, DT y entrenador y lo ves de otra forma. Es verdad que gracias a eso conozco a todos e intento llevarme bien con los medios, de colaborar, y es también por la imagen propia y la del club. Los más clásicos puede que se focalicen más sobre el campo, pero creo que esto es importante, el tema de la comunicación, comercial... de tener una visión un poco más global.

P. Y este 2025 acaba contrato, ¿qué planes tiene?

R. Todo es posible. Yo firmé seis meses la primera vez y sabía que si no se salvaba el equipo era el final aquí, aunque no seas el único responsable. Luego el año pasado fue excepcional, fui elegido mejor entrenador de la Ligue 1, y cuando llevas diez años sin entrenar, todo esto es muy fuerte. De golpe te das cuenta que todo va muy rápido y está claro que por eso hay que ser humilde, porque muchas veces no sabes muy bien cómo ha llegado todo así, tan bien, o tan mal. Este año con la Champions es extraordinario, aquí nadie podía imaginarse que íbamos a vivir algo así, con partidos como el del Madrid. Puede que renueve, pero también puede que me vaya. Irse es también dónde. Si te vas del Brest, hay cuatro o cinco clubes en Francia que pueden ganar e interesarme y los grandes no veo a Luis Enrique marchándose. Tampoco en Marsella. En Brest es difícil ganar, no vamos a ganar la Champions, tampoco la Ligue 1, la Copa pues es más factible porque es algo distinto. Si te quieres ir es para coger un equipo que te permita ganar y en Francia no hay muchos. Y en el extranjero, en Alemania lo veo complicado, por la lengua, en Inglaterra he jugado y después he trabajado ahí, en España igual, o Italia. Las opciones de Qatar o Arabia son más dinero pero menos proyección deportiva.

Kroos es una pérdida enorme, yo también adoraba a ese jugador

P. Se van a encontrar ya con el mejor Mbappé, ¿le han sorprendido las críticas en Francia?

R. No me extraña que cuando llega al Madrid, al mejor del mundo, necesite un tiempo. Creo que le han criticado más en España que en Francia, aunque tampoco me ha extrañado porque venía de un momento complicado, estaba peor preparado físicamente porque fue una campaña complicada, le habían apartado, en conflicto con el club, y ha pasado la temporada sin una buena preparación. Lo ha pagado, pero estaba seguro de que iba a triunfar, pasara lo que pasara. Es de los mejores, entre los cuatro o cinco, con Vinicius, luego tendrá altibajos como todos, pero ahora está muy bien y el Madrid también, y es una lástima para nosotros. Hace dos meses habría sido más fácil.

P. ¿Llevar el grupo como hace Ancelotti es ahora quizá más importante para triunfar en el banquillo?

Carlo me dijo la primera vez que le vi: me achacan que soy muy simpático, pero siendo amable he ganado tres Champions

R. Todo es importante, pero es clave crear un vínculo, una buena relación con tus jugadores. Y en eso Carlo es el número uno, ves que todos le quieren, incluso los que ya no están. Todos hablan bien de él y es una de su fuerza. Makelele era el adjunto de Carlo en el PSG cuando estábamos en el curso. Le dije que le pidiera a Ancellotti si tenía una hora para hablar. Fui a París y Claude me lo presentó. Fue una hora de charla y me dijo dos cosas que me han marcado. Le doy las gracias, es un hombre con clase, y me dijo: "mira, yo empecé en el Milan y tenía la educación Sacchi, el 4-4-2, estricto, milimetrado, trabajado, y cuando empiezo yo voy al Parma y tengo un número 10, que era Baggio, que era el mejor 10 de la historia de Italia, y no sabía dónde hacerle jugar y a veces prescindía de él porque no sabía dónde ponerle. Te aconsejo que te adaptes a lo que tienes y salgas de tu zona de confort. Yo al principio tenía esa duda". Luego me dijo otra cosa muy interesante: "Mira, hay veces que me dicen que soy Carlo el amable, pues esa simpatía que dicen me ha hecho ganar cinco Champions, porque por entonces había ganado tres, ahora tiene cinco, ¿no?. Quiero decir que uno es como es, puedes ganar de mil maneras diferentes, pero él con esa buena relación que tiene con los jugadores ahora tiene cinco y en el PSG llevaba tres. De hecho hay que ir al Madrid para ganar la Champions porque pasó con Zidane".

P. ¿Y cómo fue con Zidane?

R. Con nosotros cambiaron el sistema de prácticas y nos mandaban a clubes. Y fuimos todos a ver al Bayern, al Madrid dos veces con Carlo, al Burdeos, el Marsella de Bielsa... fuimos los primeros en hacer eso. Siempre juntos dos años. Al Brujas. La segunda vez ya era adjunto de Carlo. Te permite ver todo mejor.

P. Y el Madrid de mañana, mejor sin Vinicius entonces.

R. Es una pena que no esté Vinicius porque queremos medirnos a los mejores.

P. ¿Qué consejo le daría a Vinicius?

R. Es verdad que es complicado de aceptar cuando eres Vini los insultos racistas y no deberían existir. Pero después, que te insulten en los estadios, nos pasa a casi todos por desgracia. Pero ha llegado a tal nivel que tiene que estar por encima de todo eso, es lo que dije con Mbappé con quien hubo una polémica cuando vino a Brest. Hizo un doblete, marcó en el último minuto, y se mofó un poco del público, Luis Enrique cuando lo vio y le quitó y él se sentó en el campo. Hizo un poco el niño mimado y dijo que el público le había insultado a él y a su amigo, pero con clubes grandes y estrellas de ese nivel te va a pasar también en España cuando vayas a Bilbao, Cádiz o donde sea, por decir un sitio.

P. ¿Y dónde encajamos la idea de juego de Roy?

R. Lo que digo siempre, cuando me preguntan, que es complicado. Cuando llegué al Brest jugábamos más con bloque bajo, a la transición, para ganar confianza, y luego además teníamos un punta muy rápido, Franck Honorat, que se fue al Monchengladbach, y ganamos. Luego le vendimos porque nos hacía falta el dinero y su relevo es el perfil contrario, Del Castillo, más de jugar al pie, y fuimos terceros en la Ligue 1 siendo el tercer equipo con mayor posesión de balón. Por eso depende un poco de lo que tengo, pero hay algunas premisas: mucha intensidad, ir hacia adelante, jugar rápido hacia arriba. Hay cinco o seis entrenadores que están en otro nivel, pero los demás yo sería quizá más Klopp que Guardiola, incluso más Luis Enrique, porque quiere tener mucho el balón pero tiene jugadores muy rápidos. Se puede ganar de muchas formas, no tengo opción de comprar y vender diez jugadores, así que me adapto, pero quiero un equipo que corra, vivo, que gane los duelos. Carlo no podemos decir que tenga ahora una filosofía muy asentada, al contrario de otros, pero ha ganado cinco Champions.

P. Quizá porque aún lo busca con la marcha de Kroos...

R. Seguro que ha sido complicado, Kroos es una pérdida enorme. Cuando ves a Zidane hablar de él. Yo adoraba a Kroos.