Ver para creer. A Jannik Sinner le han bastado 35 días para volver a coger la forma. Y es que el italiano, tras aceptar una sanción de tres meses por su positivo de clostebol en Indian Wells 2024, no podía ejercitarse de manera normal junto al resto de su equipo hasta el pasado 13 de abril.
Sinner regresó entonces a las prácticas en el Montecarlo Country Club porque reside en el Principado monegasco. Antes de esa fecha, no podía trabajar en ningún club ni tener o con sus técnicos y compañeros del circuito profesional. Sí podía ejercitarse en canchas privadas.
Practicó con su compatriota Matteo Berrettini y Jack Draper, entre otros, antes de aterrizar en Roma el domingo 4 de mayo. Ha ganado sus cinco partidos y se ha plantado en la lucha por el título, lo que le mantiene invicto en el presente curso.
Históricamente siempre le había costado lograr resultados sobre la tierra. De sus 19 coronas, la única en cancha lenta es Umag, en 2022. Precisamente derrotó en la final a Carlos Alcaraz.
Tocado del isquio
Sinner se dolió de su isquio izquierdo en el tramo final del tercer set de la semifinal con Tommy Paul. Es el único peaje visible de su larga inactividad. El mismo viernes se borró del Open 500 de Hamburgo.
Pase lo que pase en la final del Foro Itálico, el tenista de San Cándido llegará como líder ATP a Roland Garros. Jannik será el primer cabeza de serie del cuadro que se sortea el jueves. Defiende las semifinales de la pasada edición.
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