- Directo. Manchester City - Real Madrid
A Ancelotti casi se le saltan las lágrimas cuando antes del partido vio en el vestuario a Carvajal, Rüdiger, Alaba y Militao. Los cuatro iban vestidos de calle y se esforzaban en dar ánimos a sus jugadores antes de la batalla. "Habla del problema que tenemos y de que no estamos haciendo mal las cosas", reflexionaba el entrenador del Real Madrid, que tuvo que jugar el derbi y tendrá que salir al Etihad con Lucas, Asencio, Tchouaméni y Mendy. "Es lo que hay", viene a decir Carletto, que solo puede alternar en el lateral izquierdo, donde Fran García cada vez tiene más peso en el equipo.
Una de las mejores noticias del derbi, sin embargo, la dejaron precisamente los centrales. Tanto Tchouaméni como Asencio firmaron un partidazo en el Clásico, manteniendo a raya a Julián Álvarez y Griezmann primero y a Correa y Sorloth en el tramo final del partido. Buenas noticias de cara al duelo del martes ante el Manchester City... de Haaland.
Partidazo de Asencio
El partido de Asencio fue espectacular, un encuentro de los que marcan carreras. El canterano, en la primera parte, fue el líder de la defensa, dejando muestras de su seguridad al cruce y de su velocidad. Junto a Rüdiger es el defensor más veloz que tiene el Real Madrid y salió vencedor de todos los duelos con los delanteros del Atlético. Con el balón en los pies también se mostró muy seguro, iniciando el juego desde atrás con personalidad y firmando unas estadísticas que hablan de su buen hacer: 51 pases buenos y solo dos malos.
Asencio suma ya 19 partidos oficiales con el primer equipo del Real Madrid desde que debutara el pasado 9 de noviembre por la lesión de Militao. Lo suyo fue estar en el sitio justo en el momento adecuado y desde entonces no ha hecho más que evolucionar hasta el punto de que ya no hay ninguna duda sobre él: está para jugar en el Madrid.
Tchouaméni, del penalti a ser el líder
El partido de Tchoauméni también le valió las felicitaciones de Carlo Ancelotti. El francés fue de menos a más en el encuentro y se sobrepuso a la jugada del penalti, en el que pisa claramente a Lino. No es una acción escandalosa, puesto que el jugador del Atlético de Madrid no tenía opción de llegar al balón.
Tchouaméni terminó ovacionado por el Bernabéu tras una segunda parte en la que estuvo impecable y en la que incluso rozó el gol en el juego aéreo. Con el balón en los pies, firmó un 53-4 en el balance de aciertos y fallos.
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