El fútbol saudí vive pendiente de lo que pueda suceder con Cristiano Ronaldo. La temporada no ha funcionado según esperaban en Al Nassr y el rendimiento de CR7, lejos de sus goles, no ha sido el esperado. El club se debate entre rubricar lo hablado en forma de nuevo contrato o romper con todo. Lo primero significaría un nuevo giro a la estructura y a la plantilla hacia los deseos del delantero y lo segundo, un adiós para el ex madridista, reconociendo lo mucho que ha hecho para el impacto y subida de interés del campeonato de Arabia Saudí.
En esta situación de incertidumbre, aparecen equipos y situaciones que propician que la incertidumbre crezca, especialmente con esa ventana de junio creada cara al Mundial de Clubes que está a poco más de una semana para que entre en funcionamiento.
Si el pasado domingo ya informamos de las llamadas recibidas desde Brasil, ahora hay que sumar el interés del equipo marroquí del Wydad, que será uno de los 32 participantes en la cita mundialista que organiza la FIFA a partir del 14 de junio. El deseo de los dirigentes de uno de los cuatro equipos africanos participantes en el Mundial es el de contar con el portugués para el torneo, en busca del aliciente deportivo y social que supondría la presencia de CR7 compitiendo contra los mejores del mundo.
Al Nassr sigue en disputa del campeonato saudí. Le restan dos partidos y una mínima posibilidad de entrar en la Champions asiática, aunque no depende de sus resultados y sí de que Al Qadsiah falle en el único partido que le queda en el campeonato saudí. La opción es muy remota, lo que se considera un paso atrás impensable con Cristiano Ronaldo en el equipo y con fichajes del tipo de Durán el pasado mercado de invierno.
La presencia del portugués en el Mundial es un aliciente para muchos equipos y para la propia FIFA, que nunca ha ocultado que la presencia de los dos futbolistas (Messi lo jugará con el Inter de Miami) que dominaron el fútbol tiempo atrás sería un empujón definitivo para un torneo que disputará su primera edición con al formato de 32 equipos, al más puro estilo Copa del Mundo.
En cualquier caso y con independencia del futuro inmediato, en Arabia Saudí hay preocupación por lo que significaría la posible salida de Cristiano Ronaldo. Ha sido una referencia y ha ejercido de arrastre para otros futbolistas. Incluso en los últimos días también se ha hablado de la posibilidad de un cambio de equipo, con el Al Ahli de Gabriel Veiga, proclamado recientemente campeón de la Champions, como posible destino.
Lo primero de todo que debe resolver el delantero es su situación con Al Nassr. Su contrato ya ha iniciado la cuenta atrás y lo que parecía un idilio permanente, ya no lo es ni mucho menos.
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