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Cuando los Dallas Mavericks traspasaron a su superestrella franquicia Luka Doncic culparon a su mala condición física y ética de trabajo como motivo de su marcha. Sin embargo, en una charla con el prestigioso New York Times, el exjugador de los Mavs Quentin Grimes, que ahora juega en los Sixers, desmintió esas afirmaciones que desde Dallas apuntaban a que el exmadridista había desarrollado malos hábitos de trabajo.
“Es solo un relato en torno a él. Y una vez que se lanza un relato, todo el mundo lo sigue”, dijo Grimes . “Digan lo que digan, si pesa 122 kilos y llega a la final, que pese 122 kilos. Es una locura todo esto”, apuntó.
Es solo un relato en torno a él. Y una vez que se lanza un relato, todo el mundo lo sigue. Es una locura todo esto
Grimes, de 24 años, jugó 47 partidos con los Mavericks esta temporada, promediando 10,2 puntos, 3,8 rebotes y 2,1 asistencias por partido con un 46,3% de acierto en tiros. Fue titular en 12 partidos para la franquicia texana antes de ser traspasado en febrero como parte del canje por Caleb Martin.
Una justificación falsa de los Mavs
Grimes no jugó mucho tiempo con Doncic, pero vio lo suficiente como para reconocer que las afirmaciones de los Mavericks no son más que una justificación falsa para traspasarlo así de la noche a la mañana. "Luka siempre estaba en el gimnasio y lo sé porque yo le veía trabajar para mejorar su juego cada vez que yo iba allí a entrenarme".
Luka siempre estaba en el gimnasio y lo sé porque yo le veía trabajar para mejorar su juego cada vez que yo iba allí a entrenarme
Estas afirmaciones contradicen directamente las declaraciones de los ejecutivos de los Mavericks, que afirmaban que Doncic estaba mostrando tendencias preocupantes a la hora de mantenerse en forma y perfeccionar su técnica. Según filtró Dallas, Luka no contribuyó a la cultura competitiva del equipo y dio un mal ejemplo a sus compañeros.
No querían renovar a Luka por 346,3 millones
Estas tendencias llevaron a los Mavericks a creer que no valía la pena comprometerse a firmar un contrato supermax con Luka (26 años), por el que hubiese extendido su vínculo por 5 años y 346,3 millones de dólares desde la temporada 2026-27, y crearon una sensación de urgencia para cambiarlo antes de que el jugador pudiera forzar la potestad del equipo haciendo una solicitud de intercambio formal.
Lo que los Mavericks no previeron fue el nivel de reacción negativa que recibirían por el canje de Luka. Con promedios de 26,8 puntos, 8,3 rebotes y 7,9 asistencias por partido esta temporada, había argumentos para afirmar que valía la pena mantenerle en el equipo a pesar de sus obvios déficits en defensa.
Otros testimonios que desmontan el relato de Dallas
En cuanto a su ética de trabajo, ya hemos visto muchas pruebas que sugieren que los Mavericks exageraron los problemas de Doncic. Además de las declaraciones de Grimes, Jason Kidd y Sasa, el padre de Luka, ya salieron al paso de ese relato que poco más o menos dejaba al esloveno como un vago y un jugador poco profesional. Y su rendimiento con los Lakers hasta ahora, con promedios de 24,7 puntos, 8,1 rebotes y 7,6 asistencias es la mejor demostración de que sigue siendo una de las estrellas más rutilantes de la NBA.
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