McIntosh sigue rompiendo barreras. La canadiense, de sólo 18 años, recuperó el récord del mundo de natación de los 400 libre, que había estado en poder de la australiana Ariarne Titmus desde 2023 (3:55.38), durante los trials.
Así, McIntosh, que durante los últimos meses ha realizado varios campus de entrenamiento en Francia con Fred Vergnoux -el que fue entrenador de Mireia Belmonte-, marcó un registro de 3:54.18, con lo que se convierte en la primera nadadora en bajar de la barrera de 3:55.00 en esta distancia.
La canadiense, que ya anunció que en agosto se unirá al equipo de Bowman en la Universidad de Texas -el mismo al que pertenecen Léon Marchand o Regan Smith-, mejoró en 1:20 la anterior plusmarca y se sitúa de nuevo al frente del ranking histórico de los 400 libres, que ya lideró en marzo de 2003, meses antes de que Titmus mejorara su registro.
“Siento que esto sólo acaba de empezar. Este año quería probar cosas, distintas situaciones y estímulos”, aseguró McIntosh justo después de su récord. La canadiense aseguró que nadará también en los trials los 800 libre... antes de la gran cita de la temporada: los Mundiales de Singapur en julio.
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