Hay ciertas ocasiones en las que contemplar según qué monumentos supone una experiencia única. Te da una oportunidad maravillosa de disfrutar de algunas piezas de la arquitectura antigua que llevan siglos en pie, impertérritos al paso del tiempo y asumiendo otros roles para el que fueron concebidos. Y eso es lo que ocurre con esta torre medieval y que forma parte de la historia de España.
Hablamos del castillo de Ciudad Rodrigo, ubicado en la localidad a la que debe su nombre y que se sitúa en la provincia de Salamanca, muy cerca también de la frontera con Portugal. Esta fortificación mezcla estilos muy marcados y que son clásicos de la época, con una presencia imponente del gótico militar que le da un fuerte carácter.
La gran torre de homenaje y su uso en la actualidad
Sin lugar a dudas, su mayor seña de identidad es la enorme torre de homenaje que se alarga durante tres plantas, con almenas, una muralla y varias torres de defensa que antaño permitían bloquear y atisbar con tiempo suficiente cualquier ataque que estuviera a punto de producirse.
Una de las últimas grandes batallas que tuvieron lugar en este magnífico castillo fue la guerra de Independencia contra el ejército napoleónico en el siglo XIX. Por suerte para los españoles, aquella batalla, como tantas otras, no lograron derruir esta torre de homenaje que a día de hoy tiene otros usos.
Como ocurre con muchas otras fortalezas en España, la evolución ha hecho que este tipo de lugares adopten roles diversos: colegios, museos o edificios de las istraciones públicas, etc. En el caso de esta fortaleza salmantina, hoy es un Parador Nacional de Turismo por el cual se puede pasear y ver un pedazo de la historia española. Se puede bordear o, al entrar, resulta imprescindible contemplar sus increíbles jardines.
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