Desde el jueves, 1 de agosto, las vías de trenes de la comunidad cántabra no estarán disponibles para su circulación. El anuncio llega con la imposibilidad de realizar los viajes a destinos como Madrid, Palencia o Valladolid.
La mejora en la infraestructura es el motivo de este parón en las comunicaciones. Se van a realizar obras en las conexiones de alta velocidad, a la vez que se va a producir la duplicidad de la vía convencional.
Según ha comunicado Renfe, los viajes a Palencia se harán mediante autobús con horarios que se ajustarán entre “5 y 11 minutos”. En el caso del tren regional a Valladolid dejará de funcionar en estas fechas, al igual que lo hará el “tren playero”. Las comunicaciones mediante cercanías afectarán el trayecto de Santander y Renedo que se producirá por carretera, y hasta Torrelavega del 5 al 8 de agosto.
La línea Santander – Madrid se cubrirá por Palencia. El tren una vez que llegue a Palencia, continuará su trayecto en autobús.
El proyecto de mejoras en las infraestructuras se considera “un reto”
Según Adif, es “un reto técnico y de planificación” lo que tienen por delante. Estamos hablando de, por ejemplo, la construcción de un tramo de plataformas paralelas y que se cruzan con la línea convencional Palencia – Santander, la reubicación de un tramo en el trazado Palencia Norte – Amusco, la construcción de un viaducto de 80 metros para que transcurra el cruce de líneas. La duplicación de la línea Torrelavega – Santander supone la creación de una segunda vía de casi dos kilómetros entre Renedo y Guarnizo. Por último, se va a canalizar un tramo de vía en Parbayón con losas levantadas a una altura de 60 metros que consta de casi 400 metros de longitud.En el gobierno de Cantabria no parece haber sentado muy bien estas obras, y se están pidiendo explicaciones por no haber avisado con tiempo y critican una “improvisación total”.
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