La situación en España, respecto a la pandemia que asola al país desde marzo, no es buena. A pesar de que la inmensa mayoría de los ciudadanos cumplen con las directrices de los profesionales hay personas que piensan que viven en un mundo paralelo.
Este lunes por la mañana, en la playa de Zurriola (San Sebastián), una socorrista, que está de baja tras dar positivo en coronavirus, se hallaba surfeando. Fue la alerta de un compañero a las autoridades las que le puso en alerta.
Minutos después se presentaron tres hombres enfundados en un EPI (un traje que los cubre todo el cuerpo con el fin de no contagiarse). Consiguieron que la mujer se sentara en el suelo una vez la habían esposado.
Inmediatamente, la sacaron de la playa y, de este modo, para preservar la salud de todas las personas con las que, potencialmente, hubiera podido llegar a tener o en caso de haber seguido con su vida normal. En el siguiente tweet (de @JavierSanz) se puede apreciar el momento en el que es detenida:
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