Ancelotti pide a sus jugadores no jugar con fuego en el derbi

Silencio, se juega. Carlo Ancelotti ha sido más rotundo que nunca. No más escenas como las vividas el pasado martes ante el Alavés. El técnico italiano se ha mostrado serio, contundente, rotundo, hasta elevar al grado de prohibición, aquello de protestar todo lo que pasa en el terreno de juego o por gesticular, algo tan de moda en las últimas semanas. No le gSustó lo visto, ni la reacción de sus jugadores ante el equipo vitoriano . Las continuas protestas derivaron en un clima de difícil control del partido para el equipo.

La advertencia ha sido dura. El entrenador italiano se sintió molesto como pocas veces desde que es el máximo responsable técnico de la entidad madridista. Su equipo traspasó la linea de lo que se debe permitir y el principal perjudicado no fue otro que el Real Madrid. Esa pérdida del control sobre lo que sucedía, apoyado desde la grada por ese extraño clima creado, llevó a la confusión y a coquetear con el empate en un partido que el Real Madrid tenía controlado y que terminó transmitiendo señales de debilidad y que llevó al equipo a perder el control y, sobre todo, a ver como todo el banquillo y resto del cuerpo técnico estaban fuera de sitio y casi fuera de sí, contribuyendo a ese caos vivido en el tiempo añadido. Ancelotti no quiere que bajo ningún concepto se repita algo así.

Reto para Vinicius

Llega un partido ya de por sí intenso y cargado de tensión y lo que quiere el técnico es que los suyos no formen parte de ese ambiente y si lo hacen sea por el buen juego y los goles, de ahí la prohibición de protestar, gesticular o emitir cualquier señal que pueda ser susceptible del inicio de las hostilidades. El derbi se ha convertido en algo personal para Ancelotti y por eso quiere y exige a los suyos que tengan los cinco sentidos en el balón y no en el árbitro. Y todos deben contribuir.

Vinicius volverá a ser el centro de atención de la grada del Metropolitano y el reto lanzado por el entrenador y entorno del futbolista es que entienda que lo que suceda alrededor no debe sacarle del partido bajo ningún concepto, ni tampoco poner en peligro su continuidad, tal y como hizo ante el Alavés.

El respaldo de todos

El brasileño sabe que tiene el respaldo del equipo, pero también que no puede fallar y poner en peligro la estabilidad del equipo. El partido ante el Atlético va a ser una prueba a superar por parte del delantero. Ancelotti ha insistido con él en buscar ese punto de tranquilidad y reflexión que debe tener en todos los partidos, pero más cuando va a ser uno de los grandes protagonistas, como así será ante el Atlético.

Algo parecido sucede con Jude Bellingham. Los árbitros tienen cogida la matrícula del inglés. El colectivo cree que protesta mucho, demasiado. Su actitud no es muy del agrado, pero su caso parece tener más fácil solución, pero el ex del Borussia Dortmund ya sabe lo que es ser expulsado por protestar, tal y como sucedió ante el Valencia en la pasada temporada.

Todo esto no quita para que el club, tal y como ha demostrado esta semana, siga con su campaña contra el Comité Técnico de Árbitros y contra la empresa encargada de la señal televisiva de los partidos y las ausencias de ciertas imágenes.