El Racing Ferrol ha dicho prácticamente adiós a LaLiga Hypermotion tras perder en partido aplazado contra el Burgos, el equipo que marcaba la zona de salvación. Los gallegos, que sólo han ganado un partido en A Malata en toda la temporada, se quedan a 14 puntos de su rival, con el que, además, tienen perdido el golaveraje particular.
El choque se decidió justo antes del descanso. Edu Espiau bajó de cabeza un centro desde la banda izquierda y David Castro cometió penalti al tocar el balón con el brazo extendido en una jugada sin aparente peligro. Sin Curro Sánchez en el campo, Dani Ojeda asumió la responsabilidad desde los once metros, pero Yoel, que dos años y medio después volvió a ser titular en Liga, evitó el gol con un paradón. No valió de nada. El disparo tuvo que repetirse porque varios jugadores del Racing invadieron el área antes de tiempo. El Burgos cambió de lanzador y David González, que ingresó al partido sustituyendo al lesionado Elady Zorrilla, engañó al portero e hizo el 0-1.
Arcediano: un penalti sí, pero otro similar no
Alejandro Menéndez movió el banquillo en busca de la reacción. A su equipo sólo le valía la victoria. El ataque verde se revitalizó con la entrada de Chiki y Álvaro Giménez, que tuvo una gran ocasión en un remate de cabeza. También se reclamó una mano del Burgos, muy similar a la que sí se pitó en área contraria, pero Arcediano Moncescillo no cobró penalti. Por si fuera poco, Josep Señé vio amarilla y se perderá el partido de Granada por acumulación de tarjetas. Al final, pitos contra los jugadores y la gestión de la Dirección Deportiva.
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