El parón de selecciones refuerza al vestuario de Las Palmas

El tercer parón de selecciones del curso trae a la UD Las Palmas aire fresco. Vuelve a salir el sol en la ciudad deportiva. La semana ha comenzado con alegría y buen ambiente. El que da alejarse de unos puestos de descenso en los que cayó en la jornada cuatro. Nada que ver con la última interrupción de LaLiga hace poco más de un mes. Tras perder en casa ante un Celta de Vigo con nueve jugadores, el club tomó la decisión de despedir a Carrión. Nubes negras sobrevolaban Barranco Seco, mientras el técnico saliente recogía sus pertenencias. Colista y a cinco puntos de la salvación, Diego Martínez se hacía cargo del equipo. Un mes más tarde, la película es muy diferente.

También servirá el parón para recargar pilas. Tanto física como moralmente el desgaste de la plantilla ha sido elevado: "Ha sido un esfuerzo titánico en este mes. Todos hemos ido al límite", itió Diego Martínez tras el partido en Vallecas. No jugar el fin de semana servirá para dar oxígeno a los jugadores y reforzar conceptos tácticos.

Altas en la enfermería

Pero no solo refuerza Las Palmas la moral, también se refuerza con jugadores importantes. La enfermería perderá inquilinos. Uno de ellos es Marvin, que se lesionó a finales de septiembre ante Osasuna. El balear ya entrena con el grupo y espera estar totalmente disponible para el próximo partido ante el Real Mallorca.

Lo mismo ocurre con Loiodice. Las lesiones no han dejado a Enzo ser regular, aunque su puesto está ahora mismo caro. Otro que podría reaparecer es Januzaj. El belga jugó su último partido en Valencia y aprovechará esta semana para ponerse a punto. Reaparecer ante el Mallorca es su principal objetivo ahora mismo.