El entrenador del Castellón, Johan Plat, reconoció el pasado viernes que el partido frente al Elche era una buena oportunidad para demostrar que se podía ganar sin el concurso de Álex Calatrava, ausente por sanción en la cita del Martínez Valero.
Y es que el conjunto albinegro había sufrido un bajón muy pronunciado en los dos meses que el catalán estuvo de baja por lesión, lo que convertía la nueva ausencia de éste frente a los franjiverdes en un importante reto para los castellonenses.
Pero el objetivo del técnico holandés no se cumplió y los orelluts cayeron en un encuentro en el que evidenciaron su menor calidad arriba cuando no está el barcelonés.
Cambio radical con él y sin él
Las estadísticas hablan por sí solas de la importancia que tiene Calatrava en el juego del Castellón. Cuando el barcelonés ha estado en el terreno de juego en la presente Liga, los albinegros han obtenido un registro de equipo de 'playoffs', con 10 victorias, cinco empates y seis derrotas. En cambio, cuando ha estado de baja, sus números ha sido de descenso claro, con una cosecha de una victoria, una igualada y un total de siete derrotas.
Las ausencias de este jugador se han notado de forma especial en las siete últimas veces en que no ha podido ser alineado, ya que el Castellón sufrió otras tantas derrotas con un balance de apenas tres goles a favor y 16 en contra.
El centrocampista, que lleva cuatro goles y ocho asistencias en la temporada de su debut en el fútbol profesional, regresará el próximo lunes con ocasión del partido que el Castellón disputará frente al Deportivo de La Coruña en el SkyFi Castalia.
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