Sandro Rosell reapareció este lunes en los micrófonos del programa Tot es mou de TV3 para reflexionar sobre uno de los capítulos más duros de su vida: los 645 días que pasó en prisión preventiva antes de ser absuelto de todos los cargos. La entrevista llega pocos días después de que la Audiencia Nacional acordara indemnizarle con 232.500 euros por el tiempo que pasó en la cárcel entre mayo de 2017 y febrero de 2019.
El expresidente del FC Barcelona fue acusado de integrar una organización criminal y de blanquear comisiones procedentes de partidos de la selección brasileña y contratos con una marca deportiva, una causa de la que finalmente quedó exonerado. “Lo considero una victoria moral”, declaró Rosell en relación con la indemnización. "Tenemos que pensar que la Audiencia Nacional es la institución jurídica que decide que yo y Joan Besolí tenemos que ir a la cárcel en prisión preventiva por unos hechos que no cometí. La misma institución reconoce ahora que actuó de forma injusta. ¿El dinero? No es un tema de dinero. Dos años de vida no tienen precio"
Más allá del reconocimiento económico, Rosell insistió en que no deberían ser los ciudadanos quienes asumieran el coste de esa injusticia. Por ello, anunció que prepara un recurso al Ministerio de Justicia para reclamar que sea la propia magistrada instructora del caso, Carmen Lamela, quien asuma personalmente la responsabilidad: “Es ella quien debería responder con su patrimonio”.
Durante la conversación, también relató el profundo impacto emocional que tuvo su paso por la cárcel. “Te invade la rabia. Sabes que no has hecho nada y, sin embargo, ves cómo empiezan a señalarte. El estigma es muy difícil de borrar”, confesó. Tras recuperar la libertad, su vida no volvió a la normalidad de inmediato. “Durante los primeros meses no quería ni conducir ni mirar el móvil. Tardé años en recuperar mi autonomía y acceder a mi propio patrimonio”.
Presidente del Barça entre 2010 y 2014, Rosell aprovechó la ocasión para comentar el buen momento del club, que ha celebrado esta temporada la conquista de tres títulos. Mostró especial orgullo por la irrupción de Lamine Yamal, al que vio dar sus primeros pasos en La Masia. “Tuve el honor de firmar su primer contrato como presidente. Recuerdo perfectamente a sus padres viniendo al despacho. Eso representa lo que es la cantera: trabajo, dedicación y visión de futuro. El mérito es de la gente del fútbol base, como Jordi Roura o Aureli Altimira”, afirmó.
Por último, Rosell quiso felicitar a los actuales responsables del club y dejó una frase dirigida a Joan Laporta: “Jan, piensa solo en el Barça... y tú ya me entiendes”.
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