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La final de la Fórmula E en Londres brindó a Nissan el triunfo que llevaba buscando toda la temporada. Y sucedió, además, delante de varios de los máximos directivos de la compañía, con el CEO Makoto Uchida a la cabeza.
MARCA tuvo ocasión de departir con Iván Espinosa, vicepresidente de planificación de producto de Nissan. El directivo mexicano es el máximo responsable de planificación de producto a nivel mundial, incluyendo NISMO (que se relanza ahora en Europa) y también la actividad de competición.
P: Ya que hemos vivido el final de la Fórmula E, supongo que están satisfechos con la evolución del equipo en estos dos años...
R: Sí y no. La progresión ha sido muy buena. El equipo lleva poco tiempo bajo nuestro control total y lo adquirimos porque estamos comprometidos a largo plazo tanto en la categoría y como en la electrificación. El desarrollo está siendo estupendo, pero no estamos todavía satisfechos. Competimos para ganar y todavía tenemos espacio que recorrer para llegar ahí.
P: ¿Qué consigue Nissan de la Fórmula E para sus modelos de calle?
R: Es una de las razones por las cuales estamos en la Fórmula E. Lo usamos también como un laboratorio para probar las tecnologías nuevas. Con los coches del año que viene, que van a poder usar también el motor delantero, podremos aprovechar mucho de este aprendizaje para evolucionar más nuestro sistema E-4orce. Hay muchas otras partes que podemos explorar en cuanto a gestión de energía, regeneración, refrigeración de baterías, algoritmos de distribución de potencia a las ruedas...
P: NISMO vuelve, pero con un vehículo muy diferente como es el Ariya. ¿Significa eso que los que vengan serán ya eléctricos, toda vez que nos acercamos a esa frontera de 2030 donde Nissan será eléctrica?
R: Hay varias opciones. Nuestro plan de negocios de ARC contiene una gama variada de productos. Pero es cierto que en Europa vemos que la electrificación va hacia adelante y vamos a seguir trabajando en esa línea. El potencial dinámico que tienen los coches eléctricos es muy alto, y no sólo por la aceleración. La precisión que puedes conseguir en el control de la tracción es muy alta. No la tienes en un vehículo de combustión.
P: ¿Les preocupa la tendencia decreciente de las ventas de eléctricos en Europa?
R: Es cierto que se ha frenado un poco el crecimiento acelerado que había, pero a largo plazo la electrificación va a venir. Es un tema de cuándo, y de qué rapidez tenemos que tener para transformar la gama. Mientras, tenemos todavía opciones de combustión, la tecnología e-power, algunos plug-in y vehículos 100% eléctricos. Vamos a ir gradualmente transformando la gama, gestionando las diferentes opciones dependiendo de la velocidad que lleve la electrificación. Tenemos opciones para poder manejar esta situación.
P: ¿Puede esta desaceleración provocar algún retraso, por ejemplo, en la introducción de las baterías de estado sólido?
R: No, no, nosotros seguimos 100% adelante. La planta piloto ya se ha empezado a construir y seguimos avanzando. El objetivo es en 2028 tener el primer producto con adopción de esta tecnología para producción en masa. No hemos cambiado la fecha.
P: ¿Estas baterías podrían permitirle a Europa igualar las cosas con China en cuanto a tecnología?
R: Yo lo veo más como que esta tecnología traerá productos más atractivos al consumidor. Se puede poner muchísima densidad en un paquete más pequeño de baterías, de modo que habrá vehículos más deportivos con menos peso. Y también se podrán hacer coches mucho más espaciosos.
P: ¿Serán baterías sólo para los modelos ?
P: Puede ir a muchos productos, pero hay muchas tecnologías en las baterías. Además de las sólidas hay otras como las LFP, que por el momento son las que prometen ser más económicas. Pero la tecnología sigue evolucionando así que podemos imaginar baterías de estado sólido que, eventualmente, tengan un coste accesible.
P: ¿Cree que la llegada de coches eléctricos más baratos puede animar la electrificación en Europa?
R: Que haya coches más asequibles va a ayudar. Pero otra parte donde hay que trabajar mucho es en la infraestructura y en educar al mercado. Mostrarle que los vehículos eléctricos no simplemente son más limpios, o más económicos en el coste total, sino que también pueden ser muy emocionantes, con una experiencia de conducción muy única y una emoción diferente.
P: ¿Contempla Nissan también esa vía, la de tener un modelo por debajo de 25.000 euros como ya tiene su socio Renault?
R: Siempre estamos buscando opciones. Un vehículo accesible por debajo de los 25.000 euros puede ser una oportunidad que podemos tener.
P: ¿Los aranceles a los coches chinos no pueden incidir aún más en esta ralentización?
R: Es un factor que hace mi trabajo más complicado. A la hora de planificar productos ya no basta con ver los consumidores, las tendencias y los gustos particulares de los clientes. Ahora con tantas tecnologías diferentes y la geopolítica que comentas... se vuelve un tema muy complejo. Estamos siguiendo muy de cerca este asunto, pero en el caso particular de Nissan creemos que no vamos a tener ningún impacto.
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