Tadej Pogacar ha destrozado prácticamente todos los récords a los que ha hecho frente. No en vano, en 2024 se convirtió en el único ciclista de la historia en ganar en el mismo año dos Grandes Vueltas (Giro y Tour), dos Monumentos (Lieja-Bastoña-Lieja y Giro de Lombardía) y el Mundial de ciclismo. Sin embargo, hay una prueba que se le resiste: la Milán-San Remo, la cual afrontará este sábado 22 de marzo.
El Monumento italiano de primavera es el único en el que Pogacar ha participado y no ha ganado. Este será su quinto intento, lo cual es una anomalía para el esloveno: se llevó la victoria en la Lieja-Bastoña-Lieja a la tercera (2021), en el Giro de Lombardía a la primera (2021), y en el Tour de Flandes a la segunda (2023). Este año, parece que Tadej se ha propuesto cubrir los huecos de su ya abundante palmarés, y la meta de San Remo es el primer paso.
Una recorrido que no es ideal para Pogacar
La historia de Pogacar con la Milán-San Remo es dilatada: fue el segundo Monumento que probó, allá por 2020. La carrera, imprevisible, explosiva, tiene entre sus favoritos todos los años a ciclistas de todas las clases, porque no está diseñada para ningún especialista en concreto. La edición de 2024 coronó a Jasper Philipsen después de un sprint grupal en la Vía Roma de San Remo, situación que Pogacar quiere evitar en 2025 para aumentar sus probabilidades de victoria. Fue la primera vez que el esloveno llegó al podio (fue tercero), pero eso, para Tadej, no es suficiente.
El 'Caníbal' tiene un plan para ser el primero en terminar la Milán-San Remo. Ya lo desveló, medio en broma, su compañero de equipo Tim Wellens en 'Wielerrevue': "Hemos estado bromeando que vamos a subir la Cipressa en menos de nueve minutos". Sólo medio en broma, porque se trata de una subida de 5,5 kilómetros al 4%, pero nada es imposible con Pogacar. La idea es reventar la carrera lo antes posible, ya sea en la Cipressa o en las subidas finales del Poggio, donde la pendiente llega al 6% (rampas que estuvo reconociendo en diciembre), para llegar en solitario al tramo final. Sin embargo, ningún corredor ha conseguido marcar diferencias en subida desde 1994, cuando lo hizo Giorgio Furlan.
El director deportivo de UAE Andrej Hauptman habló con el medio S.Sportal tras la épica victoria de Pogacar en la Strade Bianche. Confía en las opciones de su líder para la Milán-San Remo: "Tadej es un ciclista que nunca se queja. Dice que todo va según lo previsto. La Milán-San Remo no es la carrera que mejor se le daría a Tadej, pero le encantan los retos. Cree que algún día será capaz de ganar. Cipressa es uno de los momentos clave de la carrera y lo que suceda en la subida al Poggio también será importante".
Competencia entre 'clasicómanos'
Pogacar no estará solo en el objetivo de llevarse el primer Monumento del año. Los 'sprinters' más en forma del pelotón, como Filippo Ganna, Jonathan Milan o Mads Pedersen son una amenaza si el esloveno no logra romper la carrera antes del final. Además, la carrera será el primer cara a cara entre Tadej y Mathieu van der Poel en 2025. El neerlandés, que no ha brillado en la Tirreno-Adriático, declaró en 'Sporza' que se siente "preparado para lo que viene".
La Milán-San Remo no es la carrera que mejor se le daría a Tadej, pero le encantan los retos
Aunque Pogacar se ha hecho conocido a nivel mundial por sus proezas en las Grandes Vueltas, sus números en los Monumentos los firmaría cualquier 'clasicómano'. Desde su debut en la Lieja-Bastoña-Lieja en 2019, ha participado 15 veces en las cinco clásicas con más prestigio del calendario, ha ganado en siete ocasiones y sólo ha abandonado una vez (en Lieja en 2023). Sólo le falta por debutar en la París-Roubaix, recorrido que estuvo reconociendo en febrero junto a su compañero Tim Wellens, si bien todavía no ha confirmado su presencia en la carrera.
Volver a hacer historia
Pogacar es ya casi un especialista de la Lieja-Bastoña-Lieja. Ha participado cinco veces en este Monumento, ha ganado dos (2021 y 2024) y ha sido podio en otra ocasión (tercero en 2020). Sin embargo, donde tiene el dominio absoluto es en el Giro de Lombardía: cuatro participaciones, cuatro victorias (todas las ediciones desde 2021). Si vuelve a ganar la edición de 2025 del Monumento otoñal, igualaría a Coppi como ciclista que más veces se ha impuesto en Lombardía.
Pero primero, Milán-San Remo. Tadej Pogacar se juega entrar en el exclusivo club de ciclistas que han ganado cuatro Monumentos diferentes, formado por Sean Kelly, Fred de Bruyne, Philippe Gilbert, Louison Bobet, Germain Derycke y Hennie Kuiper. Por encima, sólo le quedarían las tres leyendas belgas que se impusieron en los cinco en algún momento de sus carreras: Eddy Merckx, Roger de Vlaeminck y Rik van Looy.
Este año, si todo va como Pogacar pretende, el esloveno participará, seguro, en cuatro Monumentos, y todavía no ha cerrado la puerta a la París-Roubaix. Nadie nunca ha ganado más de tres en una misma temporada ciclista: Merckx se quedó en tres en los años 1969, 1971, 1972 y 1975. Parece imposible superar esa cifra, pero quién sabe qué récords destrozará Tadej en 2025.
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