Sabrn decir adis a Bale? 4z3l48
jueves, 16 mayo 2019, 01:41 431q3d
El domingo Keylor y Bale jugarn su ltimo partido en el Bernabu. El tico tiene asegurada una buena despedida, pero la del gals es una incgnita.
Descender a Segunda divisin (virtualmente) encajando un gol a falta de cinco minutos en la penltima jornada y adems jugando en tu estadio es un palo duro, muy duro. Sin embargo, a pesar de la atroz decepcin que les encoga el alma en esos momentos, al finalizar el partido ante el Levante buena parte de los 13.000 aficionados del Girona se quedaron en las gradas de Montilivi. Y no se quedaron para silbar o para insultar a sus jugadores. Se quedaron para aplaudirles, para darles un homenaje merecido, en una muestra de agradecimiento por las dos temporadas que les han brindado en Primera, las nicas en la historia del club cataln. Junto a la emocionante despedida que tribut la aficin del Atltico al mtico 'Faran' Diego Godn, aquello fue lo mejor de la pasada jornada con diferencia. En una semana donde la palabra fracaso volvi a asociarse sin ningn rubor al equipo que slo diez das antes haba acumulado elogios tras ganar su octava Liga en las once ltimas temporadas esas muestras de grandeza merecen destacarse por su ejemplaridad. Entre tanta crispacin y rencor son los comportamientos a imitar.
El domingo Keylor Navas y Gareth Bale jugarn su ltimo partido como futbolistas del Real Madrid. Sin entrar a valorar las circunstancias que rodean su marcha, muy diferentes en cada caso, su contribucin a los xitos del ltimo lustro blanco es indiscutible: 4 Champions (3 en el caso de Keylor), 4 Mundiales de Clubes, 3 Supercopas de Europa, 1 Liga, 1 Copa y 1 Supercopa que conforman la segunda poca dorada del club ms exitoso del mundo del deporte. Y eso son palabras mayores. A falta de que entrenador y Direccin deportiva lleguen a un consenso sobre algunos jugadores cuyo futuro est ms o menos en entredicho, como es el caso de Isco, Kroos o Lucas Vzquez, las salidas del costarricense y el gals se dan por seguras porque Zidane ya les ha dicho que no cuentan con ellos. Ahora queda el trmite de gestionar su adis de la mejor manera posible, trmite que en el caso de Bale desde dentro del club prevn que ser muy complicado.
EL BERNABU Y LA MEMORIA
Keylor cuenta con el respeto y el cario del madridismo, y Bale no, o al menos no de muchos abonados que acuden al Bernabu y que le han pitado en sus ltimas actuaciones. Pero tanto uno como otro se merecen que el pblico madridista sea generoso, tenga perspectiva, eche la vista atrs y sepa agradecerles su contribucin a una poca que se antoja irrepetible. En el caso del guardameta, su buena sintona con Zidane y con la aficin le asegura una despedida con honores: probablemente ser titular y saldr del estadio ovacionado y emocionado.
Es Bale el que, a tenor de su fra relacin con el entrenador y con la grada, no tiene asegurada ni la titularidad ni el reconocimiento del madridismo. Y no sera justo que saliera por la puerta de atrs del Bernabu. A pesar de su irregularidad, de sus 29 lesiones (que l ms que nadie deseara haber evitado), de su carcter introvertido y de que nunca fue ese lder que nos anunciaron por razones de propaganda y que ha terminado resultando una losa descomunal por las expectativas aparejadas, Gareth Bale siempre ha intentado dar lo mejor de s al Real Madrid, y en varias finales sealadas lo ha conseguido, siendo decisivo en esos xitos. As que el madridismo debe saber estar a la altura y agradecrselo despidindole como se merece.