El rey de Europa se pone las pilas 2d3vt
jueves, 3 mayo 2018, 10:38 306sl
La auto-exigencia del campen es implacable. Se han detectado carencias fsicas y trabajar para remediarlo.
El da despus de una de las eliminatorias ms angustiosas que se recuerdan por el Bernabu (y se recuerdan unas cuantas) la euforia, la iracin y los merecidos elogios a la capacidad de resistencia del equipo dieron paso a una reflexin ms serena dentro del club. La gesta de enganchar tres finales europeas de forma consecutiva resulta indiscutible. Pero tan cierto es que este Madrid se ha habituado a sacar adelante invariablemente los partidos que juega mal en la Champions, igual que hace el Barcelona en la Liga desde hace aos, como que su clasificacin para Kiev lleg con las luces de emergencia encendidas.
Minimizar errores es una virtud y no corregirlos es un problema. El Madrid cada vez resiste ms al rival pero juega menos. Su rendimiento ha bajado de manera progresiva, algo que seguramente va relacionado con el desgaste al que le han sometido los peores rivales posibles. Desde que qued encuadrado con el Borussia Dortmund y el Tottenham en la fase de grupos, se han medido con el equipo ms caro del mundo (PSG), luego con el vigente subcampen (Juventus) y para terminar con el campen alemn, el temible y orgulloso Bayern, ltimo equipo que levant una Champions fuera de la pugna Madrid-Barcelona.
Todo esto referido a Europa, claro. Porque la temporada a nivel nacional de los blancos ha sido decepcionante de principio a fin, tanto en la Liga (17 puntos han volado del Bernabu) como en la Copa. Ganaron las dos Supercopas al United y al Bara y a mediados de agosto, con el arranque del campeonato, dimitieron.
EL CENTRO DEL CAMPO
Por fortuna, Zidane dispone ahora de tres semanas por delante para centrarse en recuperar a varios de sus futbolistas que no atraviesan por su mejor momento y trabajar a fondo la parcela fsica con el especialista Pintus. Este apartado preocupa bastante en el club a la vista del bajn que sufren los tres titulares del centro del campo, Casemiro, Kroos y Modric. La apuesta del tcnico por Kovacic ante el Bayern se interpreta como un indicador claro del desplome del mediocentro brasileo, imprescindible hasta anteayer. Eso, junto a la posicin de Modric escorado a la banda y subordinado a tapar a Alaba y Ribery en vez de a crear juego, que es lo que hace mejor que nadie, result otro experimento fallido de Zidane.
En la memoria todava permanece fresca la exhibicin que Casemiro, Kroos y Modric realizaron en la segunda parte de la final de Cardiff hace poco ms de un ao, en la que atropellaron literalmente a la hasta entonces irreductible Juventus. Por eso en el Madrid consideran clave que de aqu al sbado 26 el equipo entrene con la mayor intensidad y llene un depsito que hoy ms de uno lleva en la reserva.
