NBA 2rl22

Todo evoluciona.

Con el paso de los aos, todo lo que nos rodea acaba por adaptarse a los nuevos tiempos, y como en cualquier mbito, el baloncesto tambin nota ese proceso y ve como cada cierto tiempo las tendencias cambian de direccin, muchas veces motivado por el progreso de la raza humana y la idiosincrasia de la sociedad moderna.

Viene esto al caso porque, echando un vistazo a las plantillas actuales de los equipos, y analizando a los jugadores que ocupan la posicin de base, he concluido que yo, que para nada estoy de acuerdo con el lema 'cualquier tiempo pasado fue mejor', s que aoro aquella poca en la que un base era un base y ejerca como tal.

No digo que hoy da haya dejado de serlo para convertirse en otra cosa, ni que los actuales playmakers sean mejores ni peores que los de antao, pero lo que parece meridianamente claro es que esta posicin (para m la ms importante de las cinco), ha sufrido un proceso evolutivo exagerado en pocos aos, y que muy poco tienen que ver –estilo, fsico y mentalidad–, los bases de hace 15/20 aos con los que actualmente pululan por la mejor Liga del Mundo.

No hace tanto, el jugador que ocupaba la posicin de '1', tena unas prioridades y unas seas de identidad totalmente diferentes a las de ahora.

La organizacin del juego de ataque y buscar al compaero mejor situado para hacerle llegar el baln eran las funciones principales del que era extensin del entrenador en la cancha. Si adems era capaz de anotar con fiabilidad desde media y larga distancia, miel sobre hojuelas.

Por lo tanto, la principal misin del base era mover y organizar al equipo.
Magic y Dennis Johnson, Mo Cheeks, Mark Jackson, John Stockton, Doc Rivers o Derek Harper pueden servir como ejemplos.

Excepciones siempre hay, por supuesto, y ya por entonces los haban ms anotadores (Isiah Thomas, Sleepy Floyd, Gary Payton, Kevin Johnson o Tim Hardaway), capaces de sumar una gran cantidad de puntos -todos con un lanzamiento fenomenal-, pero sin perder de vista las obligaciones propias de su puesto.

Pero ha sido con la llegada del nuevo siglo cuando las tornas han cambiado definitivamente.

Los bases del siglo XXI son fsicamente poderosos, rapidsimos, capaces de comerse el aro rival de un salto, con una capacidad para la anotacin que para s quisieran muchos escoltas o aleros, y con esa pizca de egosmo que tanto atrae a los seguidores contemporneos y tanto saca de quicio a los clsicos.

Eso s, no les hables de organizacin, ni de buscar al compaero abierto… a no ser que se encuentren asfixiados y con el camino hacia el aro bloqueado.
Entonces, ya en el aire, se inventarn una cabriola para sacar el baln fuera (muchas veces con un pase deficiente y con el reloj de posesin amenazando), haciendo que el compaero de turno se coma el marrn.

Es otro estilo, otra manera de entender el juego.

Repasando los jugadores que tendrn mando en plaza cuando el baln vuelva a echar a botar, llegamos a una conclusin clara.

Slo unos pocos se desmarcan de este estilo actual, y recuerdan ms a lo que se llevaba hace aos.
De ellos, cinco que sobrepasan holgadamente la treintena (Billups, Nash, Andre Miller, Fisher y Kidd), para dos su misin se reduce casi exclusivamente en darle el baln a la estrella de turno y molestar lo menos posible (Conley y Chalmers), y, casualidad?, cinco son de raza blanca (Ricky, Udrih, Caldern, Hinrich y Ridnour), teniendo tres de ellos formacin FIBA.

Del resto, slo uno recuerda al base clsico sin poseer ninguna de las caractersticas arriba sealadas.
Rajon Rondo esnorteamericano, joven, negro, poseedor de un fsico ideal para el baloncesto y con capacidad para penetrar hasta el aro desafiando casi cualquier obstculo que se le ponga por delante… y sin embargo recuerda al tpico base puro, cuya prioridad sigue siendo mover a los suyos y encontrar la mejor opcin en cada uno de los ataques.

S, el base de los Celtics puede considerarse una rara avis.

Pero exceptuando al 9 del trbol, el resto tiene como denominador comn la querencia por sumar puntos y lucir a nivel individual por encima de lo que se conoce –de siempre- como un director de orquesta.

Agrupmoslos.

Deron Williams y Chris Paul, son tan sumamente buenos que se pueden permitir repartir diez ms asistencias por noche, pero sin descuidar, ni mucho menos, su casillero de puntos, el cual intentan engordar a la menor oportunidad. A diferencia de los dos siguientes grupos, son excelentes organizadores.

Luego tenemos un tipo de base espectacular, con un fsico privilegiado, que suma la mayora de sus puntos en penetraciones, pero con un lanzamiento a media/larga distancia que los deja en evidencia cada dos por tres: Derrick Rose, Russell Westbrook, Tony Parker, Jrue Holiday, Brandon Jennings, Kyle Lowry, Devin Harris, John Wall, Kemba Walker, Darren Collison, Brandon Knight, Tyreke Evans, Rodney Stuckey, Kyrie Irving… Todos cortados por un patrn casi idntico: capacidad para llegar hasta el aro rival, irregulares al mximo desde el exterior y con una capacidad para organizar el juego ms que sospechosa. El base de moda.

Y por ltimo, tenemos aquellos que sin poseer un fsico notable, han hecho del lanzamiento exterior su arma favorita, y que tampoco se distinguen, ni mucho menos, por su capacidad para llevar las riendas de los suyos: DJ Augustin, Jameer Nelson, Jimmer Fredette, Gilbert Arenas, Mo Williams, Stephen Curry, Ty Lawson, Raymond Felton y Aaron Brooks.

Como vemos, los tiempos del base puro han pasado a mejor vida, y sin que quede demostrado que el nuevo estilo de point guard vaya a ser peor que el clsico, uno tiene sus preferencias, y cuando me preguntan al respecto, siempre digo que soy muchsimo ms de Rajon Rondo que de Derrick Rose, por mucho que el de Chicago luzca un MVP en su currculum.

Old School.

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