Jugamos cuatro partidos en una semana, es algo inusual”. Chus Mateo, que se había mostrado muy crítico tras ganar al Bayern de Múnich en la Euroliga, no rebajó su malestar con el calendario. El baloncesto europeo tiene una cuesta de enero real, y afecta, directamente, al Baskonia y al Real Madrid. Son los protagonistas de un partido de Liga Endesa (20:30 horas, Movistar+) desplazado a la noche del Día de Reyes, y que marca el inicio de un durísimo periplo digno de la NBA.
El Real Madrid comenzará en el Buesa Arena un encadenado de seis partidos en 13 días. Para el Baskonia viene algo incluso más duro, con seis en 11. “Es el único deporte en el que pasa. Se exige ser a los deportistas unos superhéroes”, confesó Mateo. Su equipo mejora, pero tiene un examen durísimo y Pablo Laso, el que fue su predecesor en el banquillo blanco, es el primer escollo para los blancos.
En el camino tendrán de todo. Pues habrá tres partidos más esta semana:Granada, Kaunas en Euroliga y La Laguna Tenerife. En todos actuando como visitante. Después, doble jornada de Euroliga en el Movistar Arena y el broche será otro desplazamiento, a Andorra. El Baskonia no se queda atrás, aunque viajará menos. Su única suerte (si es que existe) serán solo dos visitas consecutivas: Bolonia en la Euroliga (viernes 10) y Girona en la ACB (domingo 12). La doble jornada europea será en el Buesa y también reciben al Río Breogán en Liga Endesa.
Cosas en juego
No serán partidos sin nada en juego. En el torneo doméstico se aproxima el corte de la Copa del Rey y para los dos la victoria se antoja clave. Más en el Baskonia, que con seis victorias podría igualar las siete del Barça y meterse en la pelea por el billete a Las Palmas.
Algo más relajado es el caso del Madrid. Buscan ser cabeza de serie en la Copa con Valencia Basket y Unicaja de Málaga cada vez más asentados en las dos primeras posiciones (récord de 12-3). En la Euroliga, urgencias ya conocidas para ambos.
Pensamos en cada rival por separado
“Es muy difícil tener bien a todos los jugadores todos los días”, repite Chus Mateo con insistencia. Y es el reto de un partidazo, entre viejos conocidos, que viene marcado por un calendario digno de la NBA en el baloncesto continental. “Pensamos en cada rival por separado”, cierran desde cada lado.
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