- Televisión. Ayuso responde a Gonzalo Miró: “Este señor vive de insultarme, algún día nos explicará el motivo”
Como uno de los temas más comentados del fin de semana, Ana Rosa Quintana ha hablado largo y tendido de lo que pareció el gesto del ‘no beso’ entre Isabel Díaz Ayuso y Mónica García. El rechazo de la presidenta de la Comunidad de Madrid ha sido criticado y alabado a partes iguales. La conductora del magazine de Telecinco se decanta más por lo segundo.
La líder del PP madrileño ha explicado su visión de lo ocurrido en ‘Espejo Público’ esta misma mañana: “Las imágenes hablan por sí solas. Lo único que le pedí fue: ‘Déjame’. Se me encara, se me echa encima”. Ana Rosa está de acuerdo con esta justificación: “Yo entiendo perfectamente que Ayuso no le diera un beso, tu espacio es tu espacio y lo ocupa quien tú quieras que lo ocupe”.
Ana Rosa concuerda con Ayuso: “Un beso se lo das a quien tú quieres”
“El saludo no se le niega a nadie, es una cosa correcta, pero un beso se le das a quien tú quieres”, ha zanjado la presentadora sobre esta polémica. Testimonio parecido al de Ayuso en Antena 3: “Hablamos de una persona (y su grupo) que afirmaron en la Asamblea de Madrid, el día anterior, que nosotros firmamos ejecuciones de muerte”.
No fue la única controversia que protagonizó Ayuso en la Conferencia de Presidentes. La presidenta de la Comunidad de Madrid se marchó al escuchar a Imanol Pradales hablar euskera. En su opinión, si “estamos hablando de un debate común: la falta de médicos en España, los problemas de inmigración, cómo los está gestionando el Gobierno… ¿A santo de qué no hablamos en la lengua común, si estamos a puerta cerrada?”.
Ana Rosa, sin embargo, ha indicado que con otro gesto habría sido bastante: “Ayuso lo había dicho, se sabía lo que iba a hacer, yo ya lo dije el viernes. No es ningún palo, Ayuso hace cosas muy bien. Por ejemplo, me pareció muy bien que no aceptara dos besos de una persona con la que no tiene relación y que tiene mala relación. Me pareció que habiéndose quitado el pinganillo, era suficiente”.
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