Con la llegada al poder de Donald Trump, Estados Unidos ha comenzado una guerra comercial con una política arancelaria con su principal competidor (China) y sus dos vecinos con los que comparte frontera (Canadá y México). Una situación geopolítica que ha valorado Pablo Iglesias, anterior líder de Podemos.
El madrileño ha asegurado que “la guerra comercial va a tener consecuencias para todo el mundo, también para los Estados Unidos”. Su visión sobre este tema es que “Trump no está apostando por una alianza entre todos los sectores oligárquicos de su país, sino con un sector muy concreto, el más agresivo, que es el de las grandes tecnológicas”.
Este hecho va a provocar que “muchas grandes empresas en los Estados Unidos vayan a perder muchísimo dinero y, al mismo tiempo, se está enfrentando contra todos simultáneamente”. Una guerra que involucra a la Unión Europea, definida por Iglesias como “un lacayo arrodillado frente a Trump y que forma parte de su organización militar que es la OTAN”.
Sin embargo, el político ha señalado que “ya hay sectores poco sospechosos de ser de izquierdas que señalan que hay que estrechar las relaciones con China” de cara a proteger los intereses comerciales del Viejo Continente.
Pablo Iglesias: “Va a ser muy divertido escuchar el payaso de Milei hablando de aranceles”
Con respecto a América Latina, Pablo Iglesias subraya que “cada vez es más evidente que Trump representa un problema” en un momento en el que “está dejando con las manos atadas a las derechas latinoamericanas”. “Va a ser muy divertido escuchar el payaso de Milei hablando de aranceles. 'Viva la libertad, carajo', pues usted puede decir a Donald Trump lo mismo”, ha añadido el exdiputado.
Pablo Iglesias, en la misma línea, ha comentado sobre Milei y el resto de los líderes de la extrema derecha que “son unos estafadores que básicamente no viven del mercado”, sino de “convertir lo público en su botín que reparten entre sus amigos”. “Ahora cualquier derecha latinoamericana que reivindique la figura de Trump no son más que antipatriotas que deben recibir una respuesta en términos patrióticos”, ha declarado el madrileño.
Para el que fuese vicepresidente del Gobierno de España, este tipo de discursos libertarios “representan básicamente una estafa”. “Son ladrones, ladrones con chaqueta y corbata, con gritos haciendo el payaso, pero son básicamente ladrones y no deberían olvidar cuál fue el final de Mussolini y de Hitler”, ha concluido.
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