Este miércoles, 25 de diciembre, un avión de Azerbaijan Airlines sufrió un accidente aéreo en la localidad kazaja de Aktau en el que han muerto 38 personas y más de una treintena han resultado heridas. En las últimas horas, esta tragedia ha tomado una nueva deriva que la relaciona con el conflicto bélico que viven Ucrania y Rusia.
El Consejo de Seguridad y Defensa de Ucrania ha asegurado que la aeronave fue derribada por el sistema de defensa aérea de Rusia. Según el Ministerio de Transporte de Kazajistán, en el avión volaban 37 personas de Azerbaiyán, 16 de Rusia, seis de Kazajistán y tres de Kirguistán. Las autoridades del país han declarado esta jornada de luto nacional.
La clave de este suceso es el viaje del avión y a dónde se dirigía. La ruta era desde Bakú, la capital de Azerbaiyán, hasta Grozni, capital de la región rusa de Chechenia. A las dos horas de vuelo, el piloto pidió hacer un aterrizaje de emergencia que le fue denegado por la niebla que había en el punto al que iba. La nave fue derivada a Majachkalá y, finalmente, a Aktau, donde se produjo el siniestro.
Ucrania asegura que Rusia “tendría que haber cerrado el espacio aéreo sobre Grozni”
Todo parece indicar que la defensa antiaérea rusa estaba en alerta por un supuesto ataque ucraniano en Grozni, la sospecha más fuerte que existe en el seno del gobierno de Zelenski. Andri Kovalenko, el jefe del Centro de Lucha contra la Desinformación del Consejo de Seguridad y Defensa de Ucrania, ha asegurado que “el avión 'Embraer 190' de Azerbaijan Airlines que volaba de Bakú a Grozni fue derribado por un sistema de defensa aérea ruso”.
En la misma línea, Kovalenko ha insistido que los rusos “tendrían que haber cerrado el espacio aéreo sobre Grozni”. La intervención del país presidido por Putin ha impedido que “se puedan salvar vidas”, según dijo el político ucraniano en su canal de Telegram. El suceso se sigue investigando, ya que algunas fuentes apuntan a que el impacto se pudo producir por una bandada de pájaros.
Sin embargo, las últimas informaciones señalan que la cubierta del avión de Azerbaijan Airlines tiene marcas similares a los daños causados por un misil antiaéreo. En la parte de la cola, son visibles los daños ocasionados por este artefacto. Igualmente, algunos de los pasajeros que han sobrevivido al desastre destacan el impacto en el fuselaje.
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