Holger Rune (12) es el primer finalista de Indian Wells tras derrotar a Daniil Medvedev (5), por 7-5 y 6-4, en 1 hora y 39 minutos.
Es la cuarta última ronda de Masters 1000 para el danés y la primera desde que cedió en la de Roma 2023, precisamente con Medvedev en el otro lado de la red. Daniil no desempolva su palmarés desde entonces y su crisis se alarga hasta los 664 días sin levantar un trofeo.
Holger celebró por todo lo alto la victoria número 150 en el circuito, una cifra que en su país sólo había alcanzado Kenneth Carlsen. En la final espera al ganador del partido que cruzará a Carlos Alcaraz y Jack Draper. Es el quinto jugador nacido en el siglo XXI en la lucha por la corona del certamen californiano.
El escandinavo se aplicó en la táctica: mucho golpe cortado y pelotas altas al revés del ruso. Holger empieza a encontrar la estabilidad en su tenis al lado de Lars Christensen, su entrenador de la infancia.
Fue él quien dio el primer golpe a la semifinal con un 'break' que le situaba con un 3-2 y servicio. En un visto y no visto, su rival tuvo bola de 5-3. No la pudo aprovechar y su verdugo se hizo fuerte desde la línea blanca. El ganador le pegaba mejor y más fuerte.
A Medvedev se le escapó la primera manga y empezó a asumir que no podría imitar a Roger Federer y Novak Djokovic, los dos únicos tenistas que encadenaron tres finales en las pistas del Tennis Garden.
Sin arsenal ofensivo
El pupilo de Gilles Cervara, sin tiros ganadores para desbordar a sus adversarios en un cemento tan rugoso, acumula un año sin plantarse en la lucha por un título. Fue en el mismo escenario en el que claudicó con Rune.
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