El futuro de Javier Aguirre sigue siendo una incógnita. En principio, el Mallorca ya ha hecho saber a todos que hasta que no se aclare la temporada no se sentará a hablar con el técnico mexicano. Sin embargo, a mí esta postura no me gusta y creo que es equivocada. Yo no entiendo que el club no le haya hecho ya una propuesta al técnico, propuesta que podría quedar anulada si hubiera un descenso que en estos momentos parece muy poco probable, por no decir imposible.
Y no me parece bien porque cuando tú crees en un proyecto debes respaldarlo. Los dirigentes del Mallorca se han pasado toda la temporada hablando maravillas de Aguirre, al que han puesto por las nubes como técnico y también como gestor de grupos. Al menos es lo que han transmitido, pero las palabras sirven de poco. Lo que vale son los hechos y en este caso para mí no han mostrado que realmente crean en Aguirre.
El mexicano es libre para elegir qué hacer la próxima temporada y yo entendería que si tiene una buena oferta de otro club a estas alturas ya la hubiera aceptado. Javier sabe que no puede esperar al mes de junio para tomar una decisión de este calado y es lo suficientemente listo para saber que en el Mallorca existen dudas razonables con respecto a su trabajo.
Por eso lo que yo percibo es que Aguirre está más lejos del Mallorca cada día que pasa salvo que las dos partes estén haciendo un paripé y ya tengan algo acordado, aunque no parece lo más lógico. Habrá que esperar todavía unos días para conocer la solución a este culebrón, un culebrón innecesario para las dos partes... salvo que ambos sepan el final y los demás no.