Rodrigo Huescas fue condenado a 20 días de cárcel por la justicia de Dinamarca, luego que el lateral mexicano del Copenhague condujo a 111 kilómetros por hora en una zona donde el límite es de 50km/h. La 'temible' prisión a la que entraría el futbolista sería la cárcel de Storstrøm, un complejo penitenciario que en otras partes del mundo podría ser un hotel de lujo.
A diferencia de las aterradores cárceles mexicanas, esta prisión es un lujo ya que incluye calles, plazas y una arquitectura que respalda el bienestar mental y físico. Dentro de este espacio de rehabilitación los reclusos cuentan con celdas con baños privados, sala de estar, obras de arte, cocina con ingredientes frescos, biblioteca, gimnasio, un campo de fútbol e iglesia.
Según la firma de arquitectura danesa C.F. Møller, que se encargó del diseño de la prisión, la intención arquitectónica era "crear unas instalaciones que reflejen la estructura y la escala de una pequeña comunidad provincial. Esto garantizará una experiencia familiar y variada del entorno penitenciario y minimizará la atmósfera institucional de la prisión. La estructura, de aspecto urbano, también se asemeja a los pueblos circundantes, integrándose así en el paisaje natural".
Podría evitar la condena
Además de ser sentenciado con 20 días de cárcel, Huescas también recibió una multa por su violación a la ley de tránsito, en la que deberá pagar 7,000 coronas danesas, alrededor de 21,000 pesos mexicanos, y no podrá conducir en los próximos tres años en Dinamarca.
El futbolista mexicano podría evitar ingresar a prisión, ya que su sentencia podría reducirse a cumplir con servicio comunitario, pero eso aún no ha sido definido por la justicia de Copenhague.
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