El Marc Márquez, deseado: "Haciendo malabares es el mejor"

Desde su desgraciada lesión el brazo derecho, en julio de 2020, Marc Márquez ganó tres carreras de MotoGP, en 2021, pero sin ser el que solía. Luego, la decadencia de Honda le hundió más, con lo que optó por irse a Gresini, el equipo más humilde de la parrilla, pero con una Ducati, aunque fuera la del curso anterior.

Eso despertó los viejos sueños de muchos de volver a verle campeón, de retornar a la gloria. Su primer test en Valencia, en noviembre, aumentó las expectativas, pero el nivel mostrado por Pecco Bagnaia y Jorge Martín, con la nueva GP24, más varios errores del ilerdense, dentro de una rápida adaptación, pararon la euforia. Él siempre fue cauto y no se vio ni candidato al título, pero logró lo que cualquiera ansiaría en la parrilla de MotoGP: ir al equipo oficial de Ducati en 2025.

Su nuevo plan es coger confianza, crecer para ir a por el deseado noveno título la próxima temporada. Para ello, sabe que un triunfo es fundamental. No llegó antes, pero en Aragón, de momento, ya tiene su primer Sprint.

Pole brutal

Llegó tras la segunda pole, tras la de Jerez y la 94 de su vida (66 en MotoGP). Y fue la más holgada, en seco, desde Valencia 2011. Hubo una propia en Brno, en 2019, con gomas lisas y asfalto mojado, aún más salvaje, pero las ocho décimas que endosó al siguiente en Motorland fueron bestiales.

Un baile

Restaba plasmarlo en la prueba corta y vaya si lo hizo. Controló el primer puesto, lideró hasta el final y marcó la vuelta rápida. Dejó al segundo, Jorge Martín, a 2.961 segundos. Una paliza en toda regla.

El de Cervera intentaba contenerse, pero, para celebrarlo, tras el éxtasis en el podio rodeado de miles de fans que le aclamaban, se marcó un baile en el box de Gresini. "La victoria de los sábados sabe bien, pero mejor sabe la de los domingos. Siempre soy ambicioso y realista. Hemos ganado, pero sólo es el sábado. Por algún sitio hay que empezar y se tienen que ir quemando etapas. Nunca había ganado una carrera al sprint, así que hemos dado un pasito más en esta evolución. Este domingo hay que tener máxima concentración para rematar la faena", soltaba.

De la misma opinión era su hermano Álex. "Nos felicitamos sin mucha euforia, porque es sólo un Sprint, pero es importante para él. Ojalá remate la faena. Tiene todos los números para poder ganar", decía. "Me alegro muchísimo, pero estaba tirando al palo muchas veces. Entonces, era algo que me esperaba, sobre todo en un circuito que le gusta. Seguro que él esperaba estar más cerca de hacer esto en Alemania, pero se le cruzó un poco con la caída del viernes. Ha demostrado ya en Jerez, que estuvo muy cerca; en Le Mans... estaba tirando al palo y, al final, llega el día que lo haces, pero hay que tener calma", añadía el bicampeón.

Entre la afición, los hay que hasta sueñan con que Marc pelee por la actual corona, aunque está a 75 puntos de Martinator. Él frena en seco todo y ite que piensa en 2025. "Un gran premio con unas condiciones especiales no lo puedes coger de referencia. Mi objetivo sigue siendo el mismo y lo voy a intentar. Contra más cerca acabemos, más preparado estaré para la próxima temporada. Me gustaría estar en la posición de Pecco Bagnaia, que va rápido en todas las carreras y sufre en una. Aquí nos encontramos muy bien y tocará confirmarlo en Misano y en las próximas carreras", aseguraba.

Malabares

Álex también lo ve así. El trazado es peculiar y de su agrado, y se han juntado factores como el reasfaltado, tiempo cambiante... "Aquí, el paquete de moto es algo menos importante, porque estás muy limitado de cara al agarre. Es quien lo gestione mejor y, como sabemos, Marc, cuando hay muy poco agarre, se vio en el primer libre, que le sacaba un segundo al siguiente, es el que marca más la diferencia. En eso que decimos de hacer malabarismos, porque aquí no vas sobre raíles, nunca sabes qué pasará exactamente, él haciendo malabares y manteniéndose encima de la moto es el mejor. Por eso aquí está sabiendo ser muy rápido", explicaba.

Pero, pase lo que pase, llegue la victoria oficial para las estadísticas 1043 días después, muchos ya ven el triunfo en el Sprint como un hito para el Mundial, para Ducati, las audiencias, etc. Acosta lo plasmaba gráficamente. "Me alegro por él. No se merecía acabar su carrera como se preveía. Eso va a ser bueno para el campeonato, va a ser bueno para los pilotos que estamos empezando, como soy yo, va a ser bueno para la gente que está detrás, para ver la superación que ha tenido. Eso es de tener un par de huevos bien gordos. Yo me quedo con eso, los huevos que le ha echado en todo. No hoy, sino lo que ha pasado desde ese día hasta hoy", soltó.

Alivio

El propio Marc itía cierto alivio. "Más que con esta victoria, me siento liberado este año. Después de lo que pasó, he seguido insistiendo. Las bolas las puse encima de la mesa cuando decidí cambiar de moto. Me expuse y decidí ir a la mejor moto para saber dónde estaba realmente mi potencial. Poco a poco, me voy acercando aunque todavía no es suficiente. No quiero despedirme de mi carrera deportiva con dudas en mi cabeza", confesaba.