Probamos el Jaguar XE 2019, ahora con nuevo diseño y una gama mecánica revisada
Modelos de coches Desde 45.600 euros

Tras cuatro años de permanencia en el mercado en un segmento encarnizado de berlinas medias no solo alemanas (también italianas, japonesas o suecas), al Jaguar XE le ha llegado el turno de ponerse al día y racionalizar la oferta.
Los cambios más llamativos del nuevo Jaguar XE 2019 afectan tanto a la parrilla como el parachoques delantero, con unas entradas de aire que otorgan mayor flujo, y unas ópticas delanteras que ahora son de tipo LED en forma de J y de corte más afilado, al igual que las posteriores, también más estrechas. Los escapes dobles están ahora separados.
El nuevo interior del XE hace un uso intensivo de materiales suaves con mayor profusión del cuero y acabados con toques metálicos, siempre dentro de un diseño clásico, tradicional de la marca. La gama se compone de tres acabados: S, SE y HSE, además de poder combinarse con el paquete deportivo R-Dynamic que incluye en el interior levas en color platinado y diferentes costuras. En el exterior, cuenta con elementos exclusivos, como unas superficies esculpidas inspiradas en los alerones de los aviones y la parrilla en color oscuro, junto a llantas más deportivas de 18 pulgadas.
Entre las opciones destaca el espejo retrovisor ClearSight, que incorpora una pantalla conectada a una cámara de visión angular de gran resolución para condiciones de baja visibilidad. Su habitabilidad delante es buena pese al ancho túnel de transmisión, mientras que en los asientos traseros sus ocupantes se ven obligados a estar sentados con las piernas algo estiradas, lo que hace algo complicado salir del vehículo. La capacidad de maletero es de 450 litros.
La oferta mecánica se ha reducido al desaparecer el motor 3.0 V6 de gasolina y también la posibilidad de optar por una caja de cambios manual, quedando uno automático de ocho velocidades. Asimismo, quedan dos motores de gasolina 2 litros sobrealimentados con 250 o 300 CV, el primero de propulsión trasera y el más potente asociado inevitablemente a la tracción total con la que consigue acelerar de 0 a 100 km/h en tan solo 5,7 segundos. El diésel es un 2 litros turbo de 180 CV que deja esa cifra en 8,1 segundos y ofrece un par de 430 Nm y un consumo de 4,9 litros a los 100 kilómetros.
El Jaguar XE 2019 toma ahora el selector de velocidades del F-Type y el mando para alternar entre los diferentes modos de conducción: Eco, Deportivo, Confort y Terreno Deslizante. El sistema opcional Configurable Dynamics también permite personalizar aspectos como la dureza de la dirección o la respuesta del cambio en favor de una buena dinámica de conducción.
Jaguar ha mejorado la suspensión que ni es blanda ni excesivamente dura y recalibrado la dirección, por lo que ahora pilotar el XE resulta una satisfacción. Y la insonorización hace difícil la distinción entre diésel y gasolina si vamos como pasajeros, con la incorporación de parabrisas acústico en toda la gama.
El precio del nuevo Jaguar XE 2019 se inicia en 45.600 euros con la versión diésel de 180 CV, apenas unos cientos de euros menos que el XE de gasolina de 250 CV. Unos consumos contenidos del primero y su buen comportamiento harían realmente difícil la elección a menos que las prestaciones lo sean todo, en cuyo caso el modelo de 300 CV sería el indicado pese a perder el placer de conducción de la propulsión trasera.
Jaguar F-Pace SVR: las garras del felino
En las mismas jornadas tuvimos oportunidad de una breve toma de o con el Jaguar F-Pace SVR, la versión más radical del modelo más vendido de la marca, que ahora trae de serie en toda la gama el sistema de entretenimiento Touch Pro con una pantalla táctil de 10 pulgadas.
Como parte del paquete de sistemas de asistencia al conductor y seguridad, dispone del control de crucero adaptativo con asistente de dirección que funciona en un rango de velocidades que va desde los 0 a los 180 km/h. Además del sistema stop & go, la frenada de emergencia a alta velocidad es capaz de detectar una posible colisión entre los 10 y los 160 km/h alertando al conductor y aplicando los frenos si éste no responde.
Además de mejoras en las calidades del interior y unos nuevos asientos deportivos extraplanos en opción con 14 ajustes realizables eléctricamente, el techo es en antelina y los pasos de las puertas iluminados. Con su motor V8 de 5.0 litros sobrealimentado por compresor que le permite erogar 550 CV y 680 Nm de par para acelerar de 0-100 km/h en solo 4,3 segundos, el SVR llega con un paquete de mejoras aerodinámicas específicas, con frenos más potentes y una afinada suspensión.