MOTOR
GP España F1

Verstappen y Russell, un pique que no afloja: "La próxima vez le traeré pañuelos"

Verstappen, en Montmeló
Verstappen, en MontmelóEFE
Actualizado

Muy en su estilo de niño enfadado, socarrón a veces y casi siempre con chispa, Max Verstappen se tomaba con humor las palabras de Russell tras la carrera. Todo sucedió en el final, El de Mercedes quiso adelantarle en la curva 1, el de Red Bull se resistió y ambos se tocaron, con el campeón cortando por la escapatoria de la curva 2 y volviendo cuarto por delante de George de nuevo.

En la vuelta siguiente en Red Bull le dijeron a Max que devolviera la posición, que en realidad nunca tuvo en inglés, cosa en la que al final los comisarios le dieron la razón. Entre el cabreo, la soberbia y el mal café, Max acabó sacudiendo un buen golpe en Mercedes '63'... Si me sancionan, que sea por algo, debió pensar.

En su estilo elegante de caballero inglés, Russell habló de "un derbi de demolición" y de que lo sentía, "por los niños que habrán visto la carrera", todo muy de té de las cinco con unas pastas.

Max al conocer las palabras de su rival, al que el año pasado en Qatar le insultó llamándole falso cuando forzó su sanción en la 'qualy' por frenarle, cuando fue a buscarle descaradamente, sacaba lo mejor de su repertorio gamberro.

"Bueno, traeré algunos pañuelos la próxima vez", se burlaba. "No, no le voy a ver más, no tengo nada que decirle y creo que en la vida no hay que arrepentirse de demasiadas cosas", aseguraba sobre algo que él considera un día más en la oficina.

Todo pasó por otro fallo de Red Bull en la parada final. Avería de Antonelli, coche de seguridad y todos a boxes para poner blandos. Como no les quedaba un juego nuevo en el garaje de Verstappen, decidieron ir a los duros. Una decisión sin sentido, pues sólo necesitaba unos para seis vueltas y con el coche vacío, pudieron colocarle uno de los usados de la calificación del sábado sin más. Allí empezó el deslizamiento, primero con Leclerc y luego el pasaje con Russell.

"Con los neumáticos duros simplemente no teníamos agarre, no nos quedaban neumáticos blandos porque hicimos tres paradas, así que eso es básicamente mala suerte. Creo que hasta ese momento se veía bastante bien para nosotros, no teníamos, por supuesto, el ritmo de los McLaren, pero con esas tres paradas todavía se veía bastante bien, poniéndolos al menos un poco bajo presión de una manera que tenían que empujar. Pero sí, desafortunadamente ese coche de seguridad llegó en el momento equivocado, pero eso también es parte de las carreras", decía sin cargar las tintas contra su escuadra.

"Luego con el neumático duro tuve un gran susto en la última curva porque no pude seguir el ritmo con estos neumáticos blandos a mi alrededor, luego en la recta ya me adelantaron y luego en la curva uno también, luego me dijeron que devolviera la posición, pero sinceramente creo que el mayor problema que tenemos es que los estándares de carrera, lo que está permitido y lo que no. No es muy natural y eso es muy frustrante, aunque a veces sea bueno para ti, otras veces te juega en contra y hoy eso me pasó", resumía. 

En realidad, si se hubiera conformado con el quinto tendría nueve puntos más y no estaría a 49 puntos de Piastri, una distancia que empieza a ser un muro, más por el dominio de McLaren que otra cosa. Pero si lo hubiera hecho no sería Max, sino Russell.

GP Espana Por más perdedores como Max Verstappen...
GP Espana Una salida brutal: Piastri da una lección a Verstappen y Alonso está en todas
GP Espana Alonso: "La gente hace sacrificios para venir aquí y había que darlo todo"

Comentarios

Danos tu opinión