La consecuencia inmediata de un golpe embocado desde 78 metros de la estadounidense Alison Lee, durante los fourball del sábado por la tarde, ha desatado las críticas en las redes sociales.
Nada más caer el eagle al agujero en el segundo hoyo del partido que medía a Estados Unidos ante Anna Nordqvist y Madelene Sagstrom, el primero vespertino, los caddies de las estadounidenses Megan Khang y Lee se quitaron los petos y los polos en mitad de la calle mientras el bullicio se apoderaba del momento.
El motivo fue que antes de salir, uno de los caddies sugirió que daría 500 dólares a las jugadoras si alguna conseguía embocar desde la calle durante el partido a lo que Lee respondió que no, que se tendrían que quitar las camisetas.
El gesto, insólito en un deporte con más de 150 años de competición, creó enorme revuelo en las redes. Pablo Larrazábal, jugador profesional, incluso escribió "¿Los caddies se quitan la camiseta para celebrar un gran golpes desde la calle? El deporte que adoro está yendo por el camino equivocado". Estados Unidos domina por 8-4 en la Solheim Cup, después de los foursome de la mañana.
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