Hablar de Fernando Gómez Colomer supone detenerse en un pedazo de la historia del Valencia y también de la Liga. Es el jugador con más partidos oficiales (552) disputados en la historia del club blanquinegro. Y sin ser delantero, el cuarto máximo goleador (143 dianas) por detrás de Mundo, Waldo y Kempes. El ‘10’ valencianista se encontró esta semana con los jugadores del juvenil de la Academia VCF, a los que animó antes de disputar la Copa de Campeones, y aconsejó sobre el camino que les queda por delante. Fernando, que también ha ocupado diferentes cargos de responsabilidad política en la Generalitat y puestos de gestión en clubes como el Castellón -director deportivo- y el propio Valencia –vicepresidente- se dirigió a los chicos con la naturalidad que le caracteriza y aprovechó para firmar algún ejemplar su biografía ‘La zona del 10’, presentada el pasado mes de diciembre.
“Estáis en una fantástica Academia VCF”, explicaba Fernando a los jóvenes talentos del Valencia, en una charla difundida por los medios oficiales. El exfutbolista les expuso cómo la coyuntura actual invita a apostar más por futbolistas formados en Paterna. “Conozco a mucha gente de la que está en el club y sé que funciona de maravilla. Además, el club confía en jugadores de la cantera porque la situación económica es como para intentarlo. Lo que está en vuestras manos es que merezcáis que se os dé la oportunidad”.
El club confía en jugadores de la cantera porque la situación económica es como para intentarlo
“Yo no tuve representante hasta tres o cuatro años después de jugar en Primera división”, revelaba Fernando a los futbolistas del juvenil. “Pensad ahora tenías ya agente de jugador desde infantiles o cadetes. Ellos siempre os van a intentar guiar por el mejor camino. Pero cuando tengáis que decidir, atended a vuestro corazón y lo que de verdad queréis hacer. Vuestra familia os puede aconsejar igual de bien”.
La anécdota del 'libro' cuando debutó con Paquito
Fernando recordó la anécdota de cómo fue su debut en el primer equipo del Valencia, con Paquito como entrenador. "Mi primer partido con el primer equipo en Mestalla fue la final del Trofeo Naranja con 17 años, contra el Peñarol. Y en el descanso me llama: “¡Fernando, Fernando!”. Y le contesté: “Dígame, míster”. Y me hizo así [adelanta las manos y abre las palmas juntas hacia arriba]: “Abre el libro. Juega como tú sabes y desarrolla lo que creas que debes hacer”.
Fernando habló como exjugador, pero también como la figura paterna que él siempre tuvo cerca en sus inicios. “El día después del fútbol es muy importante y hay que prepararse desde ya. Yo estaba en el Juvenil División de Honor y para mi padre los estudios seguían siendo lo más importante y me apretaba. No cambió hasta que llevaba ya un tiempo en Primera División. Y se lo agradezco”.
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