Luka Modric nunca olvidará el día en el que disputó su último partido como jugador del Real Madrid. Una despedida cargada de emoción y repleta de grandes momentos que el futbolista croata no olvidará nunca.
En un repaso por todo ese día, llama la atención como la leyenda del Real Madrid no pudo contener las lágrimas antes incluso de recibir el homenaje. En el viaje de bus hacia el Santiago Bernabéu, Modric rompió a llorar tras visualizar algo en su móvil que le tocó, sin duda, la fibra. Lucas Vázquez, sorprendido por la reacción del croata, consoló a su compañero.
El último día de Luka Modric en el Santiago Bernabéu fue un día de emociones y mucho sentimiento. Y si no, que se lo digan al croata. No todos los días uno se despide de la que ha sido su casa durante 13 años.
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