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Este martes 3 de diciembre se celebrará en el Estadio Santiago Bernabéu la presentación del documental 'Megaestructuras: El Bernabéu del Siglo XXI'. El evento contará con la presencia de figuras como Florentino Pérez, presidente del Real Madrid; Simon Amselem, consejero delegado de The Walt Disney Company España y Portugal; Josep Serra Mateu, director del documental; e Iván Bouso, productor ejecutivo de National Geographic.
Este documental, que se estrena el próximo 4 de diciembre en Disney+ y National Geographic, ofrece un recorrido detallado por la monumental transformación del icónico estadio madridista. La producción explora cada paso de la remodelación, desde la construcción de su innovadora fachada metálica envolvente hasta la instalación de un techo retráctil y un videomarcador de 360 grados.
Uno de los aspectos más fascinantes del nuevo Bernabéu es su terreno de juego retráctil, almacenado bajo tierra para permitir la conversión del estadio en un espacio multifuncional. El Santiago Bernabéu enfrentaba un gran reto para instalar su césped retráctil debido a su ubicación en pleno centro de Madrid, rodeado de edificios y la Castellana. Sin espacio libre alrededor, la solución fue construir una cueva de 30 metros de profundidad bajo la grada del Paseo de la Castellana, demostrando la visión y determinación de Florentino Pérez.
Los grandes desafíos de la obra del Bernabéu
El documental también pone en perspectiva los desafíos colosales que supuso esta obra, llevada a cabo mientras el equipo continuaba jugando en el estadio durante cinco años de construcción. De hecho, en el verano de 2021, las obras del Santiago Bernabéu entraron en una fase crucial. No porque el estadio estuviera cerca de completarse, algo que aún estaba lejos de suceder, sino porque faltaba menos de un mes para que el balón rodara y el público volviera a las gradas.
A tan solo 30 días del Real Madrid-Celta, ni siquiera había césped instalado. Los obreros trabajaron a contrarreloj para cumplir con los plazos y evitar recurrir al Wanda Metropolitano como alternativa. Finalmente, todo salió según lo planeado, consolidando al nuevo Bernabéu no solo como una obra monumental, sino como un símbolo de legado e innovación, destinado a asegurar el futuro del Real Madrid para las próximas generaciones.
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