El Betis ha logrado una victoria importantísima por 1-2 en su visita al Coliseum para meterse de lleno, ahora sí, en la pelea por los puestos europeos. Dos goles de Isco, uno de penalti, han servido para que el conjunto verdiblanco sumara tres valiosos puntos que le sitúan en la séptima plaza de la clasificación, empatado con el Rayo Vallecano, sexto, a expensas de lo que haga mañana el Mallorca. El Getafe ha vendido muy cara su derrota, pero ha terminado sucumbiendo al talento de Antony, que terminó expulsado, y de Isco, que vuelve a estar a nivel de Selección y reinó esta tarde en el sur de la capital.
El duelo de estilos se tradujo de inicio en un partido muy trabado, sin un dominador claro y con demasiadas interrupciones. En el primer cuarto de hora no pasó absolutamente nada cerca de las áreas. Balones largos del Getafe, elaboración imprecisa del Betis y un sinfín de disputas en las que el equipo de Pellegrini trataba de igualar la intensidad habitual de los azulones. Pero bastó que las dos grandes estrellas del conjunto verdiblanco conectaran en una rápida transición para que el panorama cambiara por completo.
Antony, genio incomprendido en Old Trafford, recibió un balón en su propio campo, se marchó de Diego Rico, dejó atrás a Alderete y corrió a toda velocidad hacia el área. Antes de llegar, frenó dejando pasar al lateral burgalés, que intentaba recuperar la posición, recortó hacia dentro y buscó a Isco, que pedía el balón en la frontal del área, de espaldas a portería. Y el malagueño, en una genialidad marca de la casa, controló girándose y, con Djené agarrándole descaradamente, remató abajo, pegado al palo, para poner el balón en la red.
Los de Bordalás, al verse por debajo en el marcador cuando aún no se había llegado al minuto 20, reaccionaron tirando de centros laterales. Pero cada vez que se exponían, el Betis corría a la contra guiado por un imparable Jesús Rodríguez, que en su primer intento buscó a Antony, impreciso a la hora de resolver la jugada, y en el segundo obligó a David Soria a intervenir tras un remate cruzado con la zurda. Domingos Duarte sufría con la nueva joya bética y tenía que tirar de faltas para intentar frenar su potencia.
El conjunto azulón tuvo un par de opciones de cabeza, una de Mayoral, que atrapó sin problemas Adrián, y otra de Juanmi, que se marchó fuera. Sin embargo, el peligro estaba en su área. Soria tuvo que sacar una mano milagrosa para evitar un autogol de Duarte en una gran jugada construida entre Antony y Sabaly que aprovechó el Cucho para entrar en el área y buscar un centro que el central despejó hacia su propia portería. El intento más claro del Getafe antes del descanso terminó con un gol anulado de Juanmi por claro fuera de juego.
El Getafe vendió cara su derrota
En el regreso de los vestuarios se repitió el guión inicial: muchas alternativas en el centro del campo, pocas llegadas de peligro. Bartra y Diego Llorente se empleaban a fondo para ganar por arriba a Mayoral, mientras Altimira, de regreso a un Coliseum por el que pasó de manera efímera, y Cardoso eran un escollo complicado para los azulones en la zona de tres cuartos. Todos en el equipo de Pellegrini ofrecían un rendimiento notable, incluso el criticado Ricardo Rodríguez, que puso a prueba a Soria con un zurdazo desde fuera del área.
Con el paso de los minutos, el Getafe empezó a jugar más en campo rival, empujando al Betis hacia su área. Juanmi intentó sorprender a Adrián en una veloz acción en el área y el temor a que se repitiera lo de Balaídos estaba en el ambiente. Pero la respuesta verdiblanca fue temible. Primero, con una gran pared de Antony con el Cucho tras la que Soria salvó un gol cantado ante el brasileño. Y después, con un sensacional golpeo de rosca del colombiano, buscando el palo largo, que terminó con el balón en la madera.
Bordalás reaccionó dando entrada a Carles Pérez y Álvaro para insistir en su plan de cargar el área con centros laterales, pero los cambios empeoraron a su equipo. Isco seguía a lo suyo, tirando de talento para darle más trabajo a Soria. Altimira demostraba con un amague y un golpeo con la zurda por qué el Betis no dudó en pagar su cláusula cuando apenas llevaba mes y medio de azulón. Y los merecimientos verdiblancos terminaron teniendo premio a menos de 15 minutos del final.
Diego Llorente ganó su enésima disputa aérea convirtiendo el área bética en un frontón;: Isco recibió el balón, se giró y arrancó la contra; el Cucho recibió por la izquierda y buscó a Antony, que llegaba por el centro desde atrás; al brasileño se le quedó atrás el balón, pero logró controlarlo y se lo devolvió al colombiano; y Alderete, pasándose de frenada, derribó al delantero bético en el área. Penalti clarísimo que ejecutó el de Arroyo de la Miel, engañando por completo a Soria.
El partido parecía sentenciado, pero del equipo de Bordalás nunca hay que fiarse. Coba, recién ingresado al terreno de juego, encontró la única manera de superar a la ordenada zaga verdiblanca, con un balón al segundo palo que Borja Mayoral hizo bueno controlando y batiendo a Adrián para darle emoción al tramo final. El Getafe vendió muy cara su derrota y lo intentó a la desesperada después de que Antony fuera expulsado por roja directa por una entrada peligrosa a Iglesias; pero acabó sucumbiendo, también con diez, por doble amarilla a Duarte.
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