Osasuna pagó el disgusto europeo del Villarreal. Llegaba el submarino y su entrenador cuestionados tras la debacle ante el Anderlecht y completaron partido muy serio ante un Osasuna que sigue horrible y que, a las puertas de las semifinales coperas, debe reflexionar en este parón porque está muy lejos de su mejor nivel.
Tras unos leves instantes de buena presión con algún robo arriba, Osasuna desapareció. Los males que están azotando a los rojillos en los últimos meses siguen ahí. El Villarreal se hizo con la pelota y con posesiones muy largas conducía el balón de su área a la contraria como si de un entrenamiento se tratase. Fueron 20 minutos de fuego que podrían haber decidido el choque.
Sin presión rival marcó el primer gol. Se paró el juego porque el balón estaba flojo y también se paró Osasuna. Reina la plantó, el balón llegó a Parejo, Gerard y el pase de Pedraza al punto de penalti lo remató Chukwueze con la rodilla al fondo de la red. Increíble pasividad de los rojillos que hubieran pasado por conos en esta jugada.
El segundo gol del Villarreal lo anuló el VAR. Samu pilló la espalda a los centrales tras una contra de libro, de nuevo sin oposición y batió por bajo a Aitor, pero estaba adelantado cuando recibió el pase. Se salvó Osasuna que estaba muerto tras esa jugada.
Sin Albiol llegan las dudas
Albiol, Terrats, Gerard, Pedraza... la victoria le salió cara al Villarreal en el tema de la lesiones. Alarmó la enésima recaída de Gerard, pero descompuso al equipo la de Albiol.
El submarino dio dos pasos atrás tras el descanso sin su central de referencia. Osasuna creció y tuvo un larguero de Brasanac y una muy clara de Abde que sacaron entre Reina y el palo.
Antes de esa jugada el balón dio en la mano de Pino tras un centro al área. Se han pitado muchos penaltis así este año, pero el casino ha decidido que hoy no era.
Morales silencia El Sadar
Osasuna proponía y dominaba, pero sin gol. Y apareció Morales. El Comandate robó la cartera a Mocayola y levantó la cabeza para batir desde el centro del campo a su ex compañero Aitor. Ahí se acabó la historia. El segundo de Morales cerró la goleada.
El Villarreal mira a Europa y las dudas se acrecientan en Osasuna cuando las semifinales de Copa de acercan.