Entre los muchos deberes que tenía la Dirección Deportiva del Eibar la pasada temporada, apuntalar la portería era uno de los más exigentes. Con las salidas de Luca Zidane y Yoel, había que recomponer de arriba a abajo esa parcela. Los elegidos fueron Fuzato y Jon Mikel Magunagoitia. Uno venía de estar cedido en el Getafe. El otro de ser una de las revelaciones del Amorebieta en la segunda vuelta del pasado curso. Sobre el papel, la titularidad apuntaba para el brasileño, por el que además se pagó un traspaso
Sin embargo, Joseba Etxeberria sorprendió dando las llaves de la portería al canterano. Y aunque Fuzato aprovechó una lesión de su compañero para aparecer en escena desde la tercera jornada, a mediados de noviembre Jonmi recuperó su puesto y ya no ha vuelto a perderlo. Entre medias, Fuzato dejó el club para volver a su país y en el mercado invernal llegó un nuevo compañero como Álex Domínguez.
Héroe Magunagoitia: ¡el Eibar empata en el 95' con gol de su portero!
La temporada de Magunagoitia es de notable alto. Se le recuerdan muy pocos errores y en casi todos los partidos ha dejado alguna parada meritoria. La cifra de goles encajados es mérito de todo el equipo, pero es evidente que el principal protagonista es él. Ha sido el tercer portero del campeonato con mejor coeficiente de goles encajados (0,94 goles por partido), sólo superado por Dituro (0,87) y Dani Jiménez (0,88).
El promedio de Jonmi es el segundo mejor de un portero del Eibar en la última década. Sólo Luca Zidane en la temporada 2022-2023 mejoró sus registros (0,80 goles por partido). Evidentemente, en los siete años en Primera era prácticamente imposible hacer esos números, pero en las anteriores tres campañas en Segunda sólo Luca en un año pudo estar por debajo del gol por partido. Tiene mucho mérito hacerlo en una cuarta campaña en la categoría de plata, lo cual habla muy bien de un engranaje defensivo que ha sido infravalorado durante gran parte del curso.
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