El Eibar afronta la recta final de año con un calendario cargado. El conjunto de Joseba Etxeberria disputará esta noche el primero de los cinco encuentros que tendrá que jugar en los próximos 16 días: Villarreal B, Andorra, Alcorcón y Sporting de Gijón son los cuatro equipos a los que se medirá para cerrar el 2023 liguero y con ello la primera vuelta de la competición. A todo eso hay que sumarle el duelo copero que le enfrentará con el Melilla este jueves. Un momento en el que el 'Gallo' tendrá que tirar del fondo de armario para repartir los minutos.
No hizo demasiada gracia dentro del conjunto azulgrana hace dos semanas conocer que el Melilla sería el rival en la segunda ronda de la Copa del Rey. Era uno de los equipos que querían evitar. No por el rival en sí, sino por el desplazamiento que le iba a tocar afrontar en una semana en la que además tenía un partido en lunes ante el Villarreal B. Juega hoy, volverá a hacerlo el jueves y cerrará el domingo ante el Andorra una semana en la que realizará casi 3.000 kilómetros en apenas cuatro días. Una paliza en toda regla.
Sin apenas entrenamientos
Habrá poco tiempo para realizar entrenamientos de calidad en una semana que, eso sí, supone una oportunidad para aquellos jugadores que no están contando con demasiados minutos en Liga. Yoel, Venancio, Simic, Yriarte, Vencedor, Yanis, Konrad, Quique o Qasmi serán titulares casi con total seguridad el jueves en Melilla, donde podrían descansar jugadores cargados de minutos como Arbilla, Berrocal, Sergio, Matheus, Aketxe, Soriano, Bautista o Stoichkov. La semana estará dividida prácticamente en dos grupos que trabajarán con cargas e intensidades diferentes.
En busca de otro pleno
Más allá de todo eso, dentro del vestuario imperan las ganas por volver a firmar una semana de pleno. No será nada fácil, pero el reto está ahí. Ganar hoy le permitiría volver a posiciones de ascenso directo, mientras que en Copa es importante avanzar para evitar un parón de casi un mes en Navidades y poder estar en la siguiente eliminatoria, donde las opciones de ver en Eibar a un equipo de Primera aumentarían considerablemente. Todo eso sin dejar pasar la oportunidad de seguir haciendo de Ipurua un fortín el domingo ante el Andorra de Eder Sarabia.
