La derrota en su visita al Ciutat de Valencia hace todavía más grande la herida del Cartagena en una temporada para el olvido. Está virtualmente descendido desde hace varias semanas y todavía quedan tres meses para la conclusión del campeonato.
Guillermo Fernández Romo cogió al equipo a 9 puntos de la salvación tras la destitución de Jandro. La situación, lejos de mejorar, ha empeorado en exceso: ahora están a 21 del 18º. Y es que desde su llegada el Efesé, el madrileño cuenta sus partidos por derrotas. Ya son ocho, con un balance de 19 goles en contra y 3 a favor, dos de ellos desde el punto de penalti.
Es algo horrible que no me había pasado en la vida. Los que venimos del barro hemos tenido que ganar siempre y ahora son situaciones insostenibles desde el punto de vista de los resultados
"Es fácil venir en una situación así y echar balones fuera, perome han contratado para ganar partidos y no he ganado ninguno. Lo llevo fatal porque no estoy haciendo bien mi trabajo", comentaba el entrenador del Cartagena tras el 3-0 contra el Levante. "Es algo horrible que no me había pasado en la vida. Los que venimos del barro hemos tenido que ganar siempre y ahora son situaciones insostenibles desde el punto de vista de los resultados", añadió.
Lo cierto es que el club y la afición ya tienen la mente en Primera RFEF. Una situación crítica para un equipo que no ha dado con la tecla para sacar adelante los resultados, sobre todo en el segundo tercio de la temporada, pese a los cambios en el mercado invernal. Ahora queda dignificar el escudo lo máximo posible y tratar de que el curso no se haga más largo de lo que se está empezando a hacer en la ciudad departamental.
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