Tal y como adelantó Radio MARCA Burgos tras el la derrota del equipo en el Martínez Valero de Elche, Jon Pérez Bolo ha dejado de ser el entrenador del Burgos CF. El partido de ayer era un ‘match ball’ para el técnico bilbaíno y no pudo sacarlo adelante.
Así las cosas, la reunión entre Marcelo Figoli, presidente y dueño del club, y Michu (director deportivo), se produjo minutos después del pitido final en el Martínez Valero. El máximo mandatario le hizo ver a Michu que la decisión por su parte era firme, pero que la última palabra siempre la iba a tener la Dirección Deportiva.
Las reuniones han continuado hasta la mañana de este lunes y han terminado con la destitución del entrenador de Bilbao. Desde la propiedad, se había dejado claro el objetivo para este año: ya no vale la estabilidad en la categoría, había que acceder a cotas más altas; y esto no es otra cosa que pelear por los 'playoffs'.
De estar tercero, a ir a la deriva
Cuatro derrotas y dos empates es el pobre bagaje en las últimas seis jornadas de un Burgos a la deriva en el último mes, en el que, ‘casualmente’, coincide con las lesiones de Kevin Appin y Álex Sancris, recuperado ya éste último. Previamente, el equipo de El Plantío hacía ganado cuatro de las seis primeras jornadas y llegó a ser tercero tras la séptima.
Bolo lo ha probado todo para sacar al equipo de un bloqueo mental más que evidente, pero no ha conseguido dar con la tecla. Pese a todo, es de agradecer lo que ha conseguido el entrenador bilbaíno. Cabe recordar que el Burgos estuvo luchando por entrar en los 'playoffs' hasta falta de dos jornadas durante la temporada anterior.
Michu, en la Copa... y un argentino, en cartera
El miércoles parece que será Michu el que se siente en el banquillo ante el CD Móstoles, ya que todavía no hay entrenador cerrado. Se barajan varias opciones… un técnico argentino ocupa la ‘pole’ de hasta siete nombres encima de la mesa de trabajo de Figoli y Michu.
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