Sus caminos se cruzaron cuando uno empezaba a ser una referencia en la medular y el otro daba sus últimos pasos en la élite. El primero, había acariciado LaLiga con su Real Sociedad en la élite. El segundo, volvió al Atlético para dar sus últimos pasos antes de emprender la carrera de entrenador en la élite. Los dos glorificaron el dorsal número 14 y el oficio de centrocampistas. Cada uno con su estilo, hace más de dos décadas arrancaban las vidas cruzadas de Xabi Alonso y Diego Pablo Simeone.
Y El Cholo dio el salto al banquillo en su Argentina mientras en su cabeza ya ejercía de entrenador. Y Alonso hizo carrera en Liverpool, Real Madrid y Bayern sentando cátedra de lo que debe ser un líder en la medular. Y los dos emprendieron un camino brillante que se iba a cruzar, vaya si se iba a cruzar.
La Copa de 2013… y la carrera de Lisboa
Y llegó la final de Copa del Rey de 2013. Sí, la que siempre señaló Simeone como la clave para convencer a su Atleti de cotas históricas. Para ello, debían superar al Madrid de Xabi tras 14 años mordiendo el polvo en los derbis. Hacerlo en el Bernabéu, además, el estadio donde lució aquella pancarta irónica y ofensiva de “se busca rival digno para el derbi”. Y el rival digno alzó el trofeo en uno de esos choques que ningún rojiblanco olvida.
Como tampoco olvidan Lisboa. Ya saben, la Champions que se acarició hasta el remate de Sergio Ramos. Ya saben, el título que voló de las vitrinas y que Alonso no pudo disputar en el césped por una sanción. No jugó, pero de aquel choque queda en la retina su carrera para celebrar aquel empate. De traje también se dan golpes que duelen.
Las semifinales de la resistencia
Con empate a uno en las grandes citas llegaron las semifinales de la Champions 15-16. El tolosarra había decidido acabar su etapa en España para abrazar al Bayern de Guardiola. Lo ganaron casi todo porque se toparon con el Real pero también con Simeone en unas semifinales que son ejemplo de resistencia.
Porque el Vasco lideraba la sala de máquinas de los muniqueses que asediaron a Oblak para remontar el 1-0 del Calderón. Pero el Cholo fue más Cholo que nunca aguantando un 2-1 que le dio el pase a la gran final y dejó a Alonso sin completar el triplete de Champions con tres equipos distintos. Se volverían a medir en fase de grupos, pero ya sin tener tanto en juego.
Y Alonso le devolvió el KO con el Bayer
El español colgó la ropa de futbolista y pasó a labrarse una carrera de entrenador en la que el banquillo del Madrid parece su destino final. Allí, probablemente, vuelvan a verse las caras como el próximo martes y el 25 de octubre de 2022, su primer duelo con traje y corbata y con muchísimo en juego.
Al menos para un Atleti que necesitaba ganar para seguir soñando con pasar una fase de grupos que se había torcido. No lo logró y por segunda vez con Simeone mordió el polvo a las primeras de cambio tras un empate a dos en el Metropolitano que tuvo un final surrealista. Un penalti fallado ya con el tiempo acabado y con varios remates posteriores que dejaron al Atleti eliminado a Xabi cobrándose facturas del pasado. Ahora, en el presente, vuelven a cruzar sus caminos… y tiene pinta de que para muchos años más.
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