Pellicer, ganador de las diez etapas disputadas -la novena quedó neutralizada-, dejó prácticamente sentenciado el rally a falta de la etapa de transición que se disputará mañana por las playas de Dakar y que llevará a los participantes al Lago Rosa de Dakar.
"Estamos a punto de conseguir nuestro objetivo de llevar la BMW hasta Dakar y para mà es un gran premio a la mala fortuna que habÃa tenido durante toda la temporada", dijo Pellicer tras la etapa.
"Hoy la especial ha sido bastante más asequible, rápida y divertida, pues hemos tocado dunas y algunas pistas con poca arena y sinuosas, y sinceramente, aunque la moto está funcionando sin ningún problema, hoy la he mimado como a mi hijo y he corrido con la cabeza", señaló.
Pelicer, no obstante, sigue siendo cauto pese a su enorme renta de más de cinco horas y media sobre Jacquart: "Aunque la distancia con el segundo clasificado es importante, no puedo ni debo cantar victoria, y hasta que mañana no me den el banderazo en las playas de Dakar no me puedo considerar el ganador de la Ãfrica Race".