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OCTAVA VICTORIA DE CASEY, CAÍDA DE PEDROSA Y ABANDONO DE ROSSI

Stoner se salva de la debacle y deja sentenciado el título 6b6773

AGENCIAS. Misano Casey Stoner (Ducati) consiguió en el Gran Premio de San Marino su octava victoria de la temporada, tercera consecutiva. El australiano ganó por delante de los dos pilotos de Suzuki, su compatriota Chris Vermeulen y el estadounidense John Hopkins, y deja virtualmente sentenciado el título mundial de MotoGP a falta de cinco carreras, ya que le saca 85 puntos a Rossi en la clasificación general.

La cita del circuito de Misano Adriático fue la más accidentada de la temporada: Dani Pedrosa se fue al suelo en la primera curva, empujado por Randy de Puniet, lance en el que también se fue por la hierba Nicky Hayden, y Valentino Rossi y Alex Barros se retiraron con problemas mecánicos.

Brillaron Checa y Elías 32b1w

El mejor español fue Carlos Checa, que acabó sexto, justo por delante del otro español 'superviviente' de la carrera, Toni Elías, que dio otra lección de pundonor tras la grave caída de Holanda.

La carrera duró cuatro vueltas, las que permaneció en pista Rossi, las que mantuvieron viva la esperanza de que alguien fuese capaz de cuestionar la hegemonía que a lo largo de toda la temporada está demostrando el piloto australiano de Ducati, que podría anticipar a japón, o incluso a Portugal, la consecución matemática de su primer título.

Desde el mismo momento en que se apagó el semáforo, Stoner se colocó al frente de la prueba y ya no se produjeron nuevos cambios, aunque sí muchos incidentes, como el que tuvo por protagonista a Pedrosa, quien dos curvas después de la salida ya estaba por los suelos al ser embestido por el francés De Puniet, percance en el que también se vio involucrado el actual campeón del mundo, el estadounidense Hayden, quien para evitar a sus rivales se tuvo que salir de la pista y cuando volvió era último.

Falló la Yamaha 43241u

Randy de Puniet y Daniel Pedrosa acabaron fuera de carrera, con el monumental cabreo del piloto español, lo mismo que sucedió algo después con el brasileño Alex Barros, quien rompió el motor de su Ducati, o Rossi. El siete veces campeón del mundo no salió bien, pero desde el principio se notó que algo no iba bien en su Yamaha. Aguantó el tipo como pudo hasta la cuarta vuelta, pero en la quinta el nuevo motor de válvulas neumáticas, que debía ser la solución a sus problemas, acabó por rendir el alma.

Fuera Rossi y Pedrosa, el resto del Gran Premio fue un paseo triunfal para Stoner, al que tampoco pudieron inquietar los dos pilotos de Suzuki, moto que funciona mejor cada día.