Una de cal y otra de arena. Hace unos meses el Corvette abrió un nuevo capítulo en sus 70 años de historia con la llegada del e-Ray, el primer híbrido en la historia del muscle car americano por excelencia. Ahora, los puristas tienen algo con lo que congraciarse con la marca: el ZR1 2024, un Corvette de los de toda la vida... pero con más rendimiento que nunca.
Baste decir que estamos ante la versión más rápida y potente de siempre. Y que, por primera vez, un Corvette supera la cifra mágica de los 1.000 caballos de potencia. Su V8 biturbo se dispara hasta los 1.064 CV, uno más que el Mercedes-AMG One con motor de Fórmula 1, por ejemplo.
El Corvette más potente y rápido de siempre
Porque este Corvette ZR1 salta al terreno de los hypercar, y se medirá, además de con el modelo de la estrella, con bestias salvajes como el Ferrari SF90 Stradale o incluso los Bugatti.
El motor es, como casi siempre en el Corvette, la clave de todo. Hablamos del mismo 5.5 V8 del Z06 que, en esa versión de aspiración natural ya se disparaba hasta los 670 CV. Pues bien, al añadirle dos turbocompresores (por primera vez en un V8 de un Corvette), su potencia se ha multiplicado.
Hasta el punto de que si sumáramos los caballos de dos motores 7.0 V8 del anterior Z06... no llegaríamos a la potencia de éste. No en vano, su V8 es el más potente que jamás ha fabricado una marca americana.
Todo más extremo
Lógicamente, la escalada de potencia que suponen las cuatro cifras de caballaje obliga a extremar todas las medidas para complementar al propulsor. Una de las más decisivas es, sin duda, la aerodinámica. Y aquí las cifras son igual de salvajes que las de rendimiento puro.
Porque salta a la vista que la carrocería de este Corvette está cincelada para aliarse con el viento, de modo que la velocidad aporte apoyo aerodinámico extra... y vaya si lo hace. Porque el downforce total que consigue es de 544 kilos a la máxima velocidad (que supera los 345 km/h). La versión de serie es más discreta (el splitter delantero y el spoiler trasero son menos llamativos), pero la que exprime todas sus posibilidades le da el aspecto de una bestia.
El agarre mecánico vendrá garantizado a través de un chasis específico con dos derivaciones diferentes. Todos los Corvette ZR1 viene con amortiguadores magnéticos y con un equipo de frenos carbonocerámicos que pueden cubrirse con llantas de carbono en opción (el mismo material del techo). Los neumáticos de serie son los Michelin Pilot Sport 4S en talla 20" delante y 21" detrás.
Pero también podrá pedirse opcionalmente con el paquete ZTK que monta un alerón trasero más agresivo de alta carga y bajos específicos para aumentar el agarre. Los muelles son más rígidos y la monta de neumáticos cambia a Michelin Pilot Sport Cup 2R semislicks.
Un guiño al pasado: la luneta trasera partida
Fue un detalle muy característico en los primeros Corvette, pero se había dejado de lado en las últimas generaciones y ahora el ZR1 lo vuelve a recuperar.
Su luneta posterior (si es que se puede llamar así porque casi es inexistente) está 'partida en dos', como la de las dos primeras generaciones del Corvette. Una espina dorsal de fibra de carbono es la que divide esa zona y justo en la parte superior se aloja la cámara que capta la imagen que muestra el retrovisor interior digital.
En el interior, la novedad más destacada es el nuevo color Habanero disponible para los tapizados y el color azul para las costuras de contraste (el azul también podrá decorar otros elementos del coche, como las llantas o la toma de isión del motor).
Se mantiene la disposición doble de las pantallas, con el cuadro digital que ahora añade un indicador de presión de turbo, y el monitor principal de 12 pulgadas. Los asientos de serie en el acabado 1LZ son deportivos con ocho reglajes, que pueden tapizarse en napa en los 3LZ.
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